"La política de seguridad tiene que ser permanente", sostuvo Uribe quien aseguró que no deben haber no domingos ni festivos para que se cumplan los objetivos de seguridad.
"Un acto de cooperación como el que se vio entre la ciudadanía y la fuerza pública para lograr la liberación de monseñor Jorge Jiménez, obispo de Zipaquirá y el padre Desiderio Orjuela, párroco de Pacho, Cundinamarca; le da a uno un gran alivio y abre una luz de esperanza".
A su vez el presidente pidió a los familiares de secuestrados no entorpecer las acciones de las Fuerzas Armadas. "Ahí vamos todos; con prudencia, pero sin pausa", agregó.