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Crónica de unas elecciones inéditas en Internet

De nada sirvió convocar a nuevas elecciones. Entre votaciones inexplicables, cambios de resultados en tiempo récord e insultos y acusaciones de los usuarios, los comicios en Semana.com repitieron los esquemas de las jornadas electorales en el país real y demostraron que cuando de política se trata, ningún truco sobra.

3 de abril de 2007

¿De qué serviría revocar el Congreso de la República? Con la idea de dar respuesta a este interrogante, Semana.com decidió llevar a cabo una jornada de elecciones virtuales y permitir a sus usuarios votar por un listado de candidatos, para ver si cambiaría el rostro de los llamados padres de la patria en una nueva jornada “democrática”, en especial tras los escándalos de la ‘para-política’.

El que este fuera un ejercicio reflexivo, sin mayores consecuencias para el país real, nos hizo suponer que no tendríamos que lidiar con los trucos de las campañas, el tráfico de influencias, la publicidad política, las quejas permanentes de los votantes y cuanta estrategia se han inventado los candidatos para alcanzar su objetivo.

Pero más tardó Semana.com en poner su tarjetón al aire que en empezar a recibir quejas. Y claro, los primeros en protestar fueron algunos de los políticos que no aparecían en el listado. Equipos de prensa de algunos senadores llamaban o escribían preguntando sobre la exclusión de sus jefes, pese a que se habilitó un espacio para que los usuarios consignaran allí los nombres de quienes merecían ser propuestos como candidatos.

Entre acusaciones que iban desde la falta de objetividad y el ejercicio de las mañas de los medios, hasta la ignorancia de lo sucedido en el país político, se vivieron los primeros días del intento de elecciones.

Este temporal inicial fue apenas un aviso de lo que esperaba a los maltrechos comicios y sus proponentes. Pues, en cuestión de horas, un apacible ejercicio democrático se convirtió en un proceso tan complejo como las elecciones que llevaron a Misael Pastrana a la Presidencia, aunque el país jure que el vencedor fue Rojas Pinilla.

Crónica electoral

A diferencia del sistema empleado por la Registraduría Nacional, la metodología de Semana.com permitía ver a los usuarios los resultados parciales de las votaciones, para garantizar la transparencia en el manejo de las cifras... Ese acto de fe se pagó bien caro. Aunque los dos primeros días los sufragantes respetaron las reglas de juego y no hubo variaciones sospechosas en los resultados, a partir del tercer día nuestras urnas virtuales empezaron a ser cada vez más parecidas a las de ciertas zonas del país.

Mientras al inicio de la jornada Gustavo Petro, con una modesta votación, se ubicaba en primer lugar y era seguido de cerca por Jorge Robledo, Antanas Mockus y Martha Lucía Ramírez, tres días después la senadora del Mira Alexandra Moreno Piraquive pasó de tener un número razonable de votos, a sumar cada hora más de una docena. Por tanto, en un hecho que ni el mismo pueblo cristiano hubiera podido vaticinar, la senadora pasó de sumar cerca de 70 votos en tres días, a poner mil en una noche (cifra extraña si se tiene en cuenta que sólo se podía votar una vez al día desde un mismo computador).

Pero, además de ese dominio notorio en los comicios, sus seguidores arrancaron una campaña de promoción sin precedentes. Pese a ir ganando con sobrada ventaja y en tiempo récord, los fans de Moreno Piraquive consignaron varios comentarios señalando la persecución de la que supuestamente fue víctima, al ser incluida en su reseña información sobre algunas acusaciones que recayeron sobre ella en el pasado y fueron difundidas por la Revista Cambio. Igualmente, enviaron cuanto correo electrónico pudieron con los mismos fines.

El asunto es que en tanto los seguidores del Mira emprendían esta labor milagrosa y acusaban a SEMANA de perezosa, mentirosa y demás... El resto de usuarios usaba los mismos adjetivos y agregaba el de fraudulenta para referirse a la extraña rapidez con que Moreno subía en los comicios sin explicación lógica.

Con más críticas que las recibidas por la Registraduría y menos credibilidad que el último censo nacional, las elecciones del nuevo Congreso promovidas por este medio aún tendrían que enfrentar una última etapa de terror.

De tú a tú

Como en política no hay enemigo pequeño ni estrategia exitosa que no sea imitada, pocos días antes de cerrarse las votaciones otros candidatos empezaron a subir de manera vertiginosa. También, sin explicación alguna. Así las cosas, Moreno Piraquive perdió el primer lugar que ocupó por casi una semana ante Germán Vargas Lleras. Y otra vez... regaños, insultos, acusaciones.

Sebastián, un usuario de Pereira, dejó testimonio de su inconformidad y de lo fraudulento de las votaciones, con estas palabras: “Con extrañeza observé como el candidato Germán Vargas, después de unas horas de estar en los últimos puestos, pasó al primer lugar. Aun así, voté por mi candidata preferida y le di regresar para luego volver a mirar el resultado de los candidatos; con asombro me di cuenta de que en sólo 30 segundos el candidato Vargas Lleras aumentó 1.200 votos. Esta operación la hice en varias oportunidades y, obviamente, me di cuenta de que la seguridad de esta página no puede contra los alcances de la politiquería de estos personajes”.

Desde ese momento, la lucha entre los seguidores de Moreno Piraquive y los de Vargas Lleras fue a muerte. Siguiendo la misma estrategia, y pese a los esfuerzos hechos por los ingenieros de Semana para asegurar el correcto funcionamiento de la herramienta, los dos grupos se dedicaron a sumar votos, como si se jugaran la vida en ello.

El mecanismo para hacerlo fue tan exitoso y barato, que superó en mucho lo logrado en las campañas que suelen hacer los políticos en época preelectoral en todo el país. Pues, al final y en 15 días, Moreno Piraquive obtuvo 144.118 votos, aunque en los comicios reales de 2006 su partido tuvo apenas 93.394 votos más que en estas elecciones virtuales. Vargas Lleras, por su parte, consiguió 134.318 votos (sólo 89.012 votos por debajo de su votación de 2006).

Claro, detrás de ellos, otros candidatos, rezagados al inicio, siguieron el mismo camino y lograron colarse en los primeros puestos de la clasificación final. No en vano las cifras finales marcan una gran distancia ente los candidatos que ocuparon los primeros ocho puestos y los que siguen en el listado. Mientras María Consuelo Araújo, que ocupó el octavo lugar, alcanzó 98.813 votos, Antanas Mockus, ubicado en el noveno, apenas sumó 15. 089. O sea que la ex canciller le sacó una ventaja de cerca de 80.000 a sus contrincantes más cercanos...

Lo más insólito, sin embargo, es que después de haber cerrado las elecciones y haber sacado el fallido tarjetón del aire, el viernes 23 de marzo, la senadora del Mira seguía sumando votos. En una última revisión de la herramienta, el jueves 29, la sorpresa fue encontrar que había conseguido más de 4.000 votos nuevos. Ni siquiera el paso del tiempo y la finalización de los comicios pudo contra el empeño de sus seguidores. Bien lo decían en un comentario firmado por el ambiguo usuario “Vamos Mira”: “Los del Mira siempre mostraremos que somos los mejores, sin importar las herramientas que usen los demás. La verdad siempre saldrá adelante”.

Aunque por dos semanas los periodistas, editores e incluso diseñadores tuvieron que convivir con las quejas y los insultos de los votantes de todos los bandos, y también con los llamados de atención de quienes se tomaron en serio las elecciones y actuaron con ética en la selección de un nuevo Congreso, la propuesta interactiva de SEMANA sirvió al menos para confirmar que cuando de política se trata, nada funciona como estaba previsto.

Por tanto, podemos concluir que estas elecciones virtuales no tienen nada que envidiarles a las reales. Presentaron los mismos vicios, la mismas maquinarias, los mismos errores estructurales (a pesar de los esfuerzos de nuestros ingenieros, personas recursivas lograron burlar los controles de seguridad) y la misma concentración de votos que las elecciones reales, como las que el año pasado permitieron la subida al poder de ‘parapolíticos’ y otros caciques que ya tienen raíces en el Capitolio Nacional.

El nuevo Senado

Según el mandato de nuestros votantes (la voz de los usuarios es la voz de los políticos), el Congreso virtual sería bien parecido al que en 2006 llegó al Capitolio. Primero, porque ganaron los que tuvieron una maquinaria detrás que presionó y gestionó su victoria. Aquí no importó que fueran políticos tradicionales -cuando la gente se queja de los viejos gamonales, pero sigue eligiéndolos- o que estuvieran “al borde”. Segundo, porque aunque “las nuevas propuestas” fueron más en número, estuvieron representadas por personajes cercanos al gobierno o que han ocupado algún puesto de elección popular. Tercero, porque aunque les dimos a nuestros usuarios la posibilidad de proponer candidatos nuevos, alejados de la clase política, y con ideas, optaron por los mismos (Armando Benedetti, Cecilia López y Piedad Córdoba). Y en caso de no hacerlo, se decidieron por personajes de la prestancia y formación política de Daniela Franco, “Barney, el primo marica de Godzilla” y el Hombre Araña, entre otros. El único nuevo con alta aceptación (cuyo nombre omitimos por error en “las nuevas propuestas”) fue Sergio Fajardo, quien tuvo algo más de 100 votos.

Este es el Congreso elegido por ustedes:

1. Alexandra Moreno, 144.118 votos. (De la categoría “Los más votados”)
2. Germán Vargas, 134.318 votos. (De la categoría “Los más votados”)
3. Alberto Carrasquilla, 118.391 votos. (De la categoría “Nuevas propuestas”)
4. José Obdulio Gaviria, 102.680 votos. (De la categoría “Nuevas propuestas”)
5. Martha Lucía Ramírez, 100.953 votos. (De la categoría “Los más votados”)
6. Gina Parody, 100.496 votos. (De la categoría “Los más votados”)
7. Enrique Peñalosa, 100.040 votos. (De la categoría “Nuevas propuestas”)
8. María Consuelo Araújo, 98.813 votos. (De la categoría “Nuevas propuestas”)
9. Antanas Mockus, 15. 089 votos. (De la categoría “Nuevas propuestas”)
10. Dilian Francisca. Toro, 14.899 votos. (De la categoría “Los más votados”)
11. Luis H. Gómez, 13.028 votos. (De la categoría “Los de siempre”)
12. Piedad Zuccardi, 13.011 votos. (De la categoría “Los de siempre”)
13. Mario Uribe, 12.412 votos. (De la categoría “Al borde”)
14. Roberto Gerlein, 11.952 votos. (De la categoría “Los de siempre”)
15. Gustavo Petro, 10.498 votos. (De la categoría “Los más votados”)

Los candidatos de los usuarios

Dentro del tarjetón les dimos a nuestros usuarios la posibilidad de sugerir candidatos que por alguna razón omitimos. En este espacio, sospechosamente volvió a aparecer el nombre de Moreno Piraquive y otros miembros de su partido, el concejal de Bogotá Carlos Alberto Baena y la representante Gloria Stella Díaz, todos, con adjetivos como “la más bonita”, “el mejor concejal de Bogotá”, “la intachable senadora” y “la eficiente doctora”, entre otros.

Estos fueron algunos de los candidatos propuestos por ustedes:

Armando Benedetti, senador de La U, con casi mil votos.
Sergio Fajardo, alcalde de Medellín, con más de cien votos.
Tomás y Jerónimo Uribe, hijos del Presidente
Cecilia López Montaño, senadora liberal
Nicolás Uribe, representante de La U
Piedad Córdoba, senadora liberal
Gloria Cuartas, ex alcaldesa de Apartadó
Laura Acuña
El Padre Chucho
Carlos, el ‘Pibe’ Valderrama
Adolfo Hitler
Angelina Jolie
Teddy Roosevelt
Pirry
Homero Simpson
Daniela Franco
El ‘Tino’ Asprilla
El ‘Cuentahuesos’
Los 4 Fantásticos
El pájaro Loco
Linterna Verde
El Hombre Araña