Del absurdo y la duplicidad

El tema de la duplicidad ha sido abordado desde diversas perspectivas por Ana Patricia Palacios en sus trabajos más recientes. Igualmente, en algunas de sus propuestas ya aparecía el interés por soportes y formatos ajenos a la bidimensionalidad en su sentido más puro.

Absurdos paralelos, la videoinstalación que la artista exhibe actualmente en el Mambo sigue esas rutas. Plantada en una escenografía urbana, Palacios se enfrenta de nuevo a la tarea de ver al otro como a sí mismo e introducirse en un mundo de secuencias simultáneas que parecieran, sin embargo, coincidir en una misma dimensión.

Las tres pantallas que registran en algunos casos movimientos reiterativos y en otros conducen por un laberinto de ritmos variables, más que convertirse en mero registro de la realidad, construyen, a partir de algunos elementos gráficos y de la construcción estética de los personajes, referentes de reflexión en torno al absurdo y la ironía.

Es así como la video instalación de Palacios se reencuentra con algunos de los elementos que han caracterizado su obra. Pues, aunque se muevan en espacios urbanos, aunque en algunos de esos paisajes el ser humano aparezca como un referente distante de las luces de las grandes ciudades, en su trabajo hay siempre una manera de profundizar en el ser y olvidar el estar. Un camino para establecer dentro de las fragmentaciones un bloque narrativo y para imaginar un universo que aparece apenas sugerido por su creadora.

A su vez, esta obra es un continuar pero también un fin. Un continuar porque sigue la línea de otras series presentadas por la artista, en las que, entre otros elementos, hay referencias a su propia condición de gemela y al sentido dual del individuo. Y un fin porque es suficientemente contundente a nivel plástico para sobrevivir sin conocer los antecedentes.

La obra de Ana Patricia Palacios podrá apreciarse durante este mes en el Museo de Arte Moderno de Bogotá.