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Martes, 11 de Julio

Inhabilitado Guillermo Fino por 20 años

Aplicándole la pena disciplinaria más alta que se le haya impuesto alguna vez a un funcionario público, la Procuraduría destituyó e inhabilitó a Guillermo Fino por 20 años y lo sancionó además con una multa de más de 25 millones de pesos.

11 de julio de 2006

En su fallo de primera instancia, el Ministerio Público concluyó que el ex presidente del Instituto de Seguros Sociales incurrió en lavado de activos y que le exigió en 2002 una comisión del 10 por ciento a la firma Fresenius Medical Care Colombia S.A. a cambio de adjudicarle un contrato por 40 mil millones de pesos para la prestación de servicios médicos y quirúrgicos a pacientes con insuficiencia renal adscritos al Seguro Social.

Los 4 mil millones de pesos fueron cancelados por el representante legal de Fresenius, con recursos provenientes del anticipo de 16 mil millones de pesos efectuado por el ISS el 5 de abril de 2002, mediante cheques girados a una cuenta clandestina a la contabilidad de Fresenius, abierta por ese mismo representante, según la Procuraduría.

La Procuraduría pudo constatar que Fino cobró además otra comisión para ordenar la cancelación de la cartera pendiente que tenía el Instituto con la firma Fresenius a la fecha de 30 de junio de 2001.

“Para tal efecto, el ex presidente del Seguro Social suscribió un contrato de acuerdo de pago con dicha firma, por más de 40 mil millones de pesos, valor sobre el que solicitó una participación del 6% que le fue cancelada por el Representante Legal de Fresenius, también mediante cheques girados a nombre de diferentes personas, que posteriormente se hicieron efectivos y fueron convertidos en divisas”, dice el boletín de prensa de la Procuraduría.

A la misma cuenta fueron girados varios cheques - hasta 31 en un día- que el Representante Legal de Fresenius entregó directa e indirectamente a terceros, para convertirlos en dólares americanos y entregarlos finalmente a Fino.

La Procuraduría concluyó que Fino actuó con dolo por cuanto conocía plenamente la irregularidad de los hechos y pese a ello, continuó con su conducta, incluso utilizando intermediarios para evitar dejar rastro en las transacciones.

Según la Procuraduría, Fino, para darle visos de legalidad a la comisión obtenida de manera ilegal, concibió y comenzó a implementar un plan para lavarlas bajo la figura de arbitraje de divisas a través de la empresa Inversora de Valores S.A., creada a través de otra persona jurídica.

La investigación -adelantada por la Comisión Especial Disciplinaria, conformada por la Dirección Nacional de Investigaciones Especiales y la Procuraduría Segunda Delegada para la Contratación Estatal que la presidió- y la condena son ejemplares. Al ex coronel Mauricio Santoyo, ex jefe de seguridad de Álvaro Uribe, le habían aplicado 10 años por interceptación ilegal de comunicaciones, la más alta hasta el momento. 
 
Ahora toca ver qué pasará con Fresenius, que habría sido la beneficiaria de la cuantiosa 'mordida'. De esta forma, como pocas veces se ha visto en la justicia colombiana, se estaría sancionando los dos extremos de la cuerda de la corrupción, quien recibe y quien paga (ver artículo relacionado ¿Culpable?).

"Por ser una empresa especializada del sector salud, específicamente en el tratamiento de enfermos renales, su nombre es poco conocido. Pero con ingresos el año pasado cercanos a los 7.000 millones de dólares, cotizando en las bolsas de Nueva York y Frankfurt, y atendiendo directamente más de 150.000 personas en 1.610 clínicas propias en todo el mundo, una acusación de esa naturaleza sería de marca mayor", advirtió la revista Semana días antes de la condena penal de Fino, que hoy se encuentra recluido en las casas fiscales de la Cárcel de la Picota.

Rodrigo Díaz Sendoya, el anterior gerente general de la multinacional en Colombia, y quien fue por ocho años el artífice de la consolidación de esta empresa en el país, dijo públicamente que la casa matriz de Alemania le dijo que solucionara, como fuera, la deuda atrasada que el Seguro tenía con ellos.
 
Con esta decisión, queda claro que el Ministerio Público tampoco creyó en los argumentos de la defensa de Fino (ver ¿Quién miente más). Fino termina así su carrera política, que había sido muy destacada. Arrancó como secretario de Hacienda del Distrito a comienzos de los años 90, después como funcionario estrella del gobierno de Andrés Pastrana, al frente de la Dian y del Seguro Social, y ahora como concejal de Bogotá, elegido con la mayor votación en los pasados comicios.