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Las nuevas energías se dan cita en Maloka

Los niños podrán disfrutar de la nueva sala interactiva de gas natural y conocer más acerca de este hidrocarburo, que cada vez se impone con mayor fuerza en la industria.

Sarita Palacio
3 de noviembre de 2006

La preocupación por descubrir fuentes de energía cada vez más económicas, ecológicas y abundantes, ha posicionado al gas natural como el combustible fósil más apetecido en el mundo. Colombia se ha vinculado a esta nueva tendencia y ya son varias las empresas que buscan educar a sus clientes en esta nueva cultura energética.

Conscientes de esta nueva tendencia, Maloka, y la empresa Gas Natural inauguraron la primera sala interactiva de gas natural en el nivel nacional. Mediante esta aula experimental se pretende dar a conocer las utilidades, los procesos y los cuidados que hay que tener en cuenta a la hora de hacer uso de este tipo de energía.

Según Abel Rodríguez, secretario de educación de Bogotá, “tenemos que tener en cuenta que los niños son el futuro del país y que por tanto debemos educarlos en la utilización de energías que no contaminan y presente en grandes cantidades en el territorio nacional”.

A través de la alianza y con una inversión que supera a los 1.000 millones de pesos, se llevará a cabo el programa Gas natural en la escuela, que durante cinco módulos capacitará a 125.000 niños de colegios de Bogotá, sobre los usos y los beneficios del gas. Este proyecto educativo se creó después de varios intentos por generar espacios para el estudio de nuevas formas combustibles como parte de sus proyectos de responsabilidad social.

En la sala, los niños podrán hacer un recorrido por la evolución de los combustibles desde 1881, cuando las calles del centro de Bogotá eran iluminadas con faroles de vela y petróleo, hasta llegar a los nuevas tecnologías implementadas para utilizar combustibles como el gas natural y el biodiesel.

Recorridos virtuales en auto por la ciudad son algunas de las actividades dispuestas para que los jóvenes aprendices comparen entre el diesel, la gasolina y el gas natural, y descubran cuál de los tres les presta mayores beneficios a ellos y al ambiente.

Otras atracciones se posicionan en la sala como las más apetecidas; es el caso de una plataforma en la que se muestra el proceso del gas desde su producción hasta la distribución hogar por hogar, y en la que el individuo deberá ejecutar ciertos comandos para que el gas llegue a su destino final.

Cuidados especiales con los dispositivos que proveen gas natural, experimentos para comprobar los efectos de cada forma de energía en el ambiente, además de instalaciones en las que los jóvenes pueden descubrir cuánto dinero ahorran sus familias a la hora de implementar el gas natural en su hogar, se suman a las atracciones de esta estación del conocimiento energético en Maloka.

Para Nora Elizabeth Hoyos, directora de Maloka, “las clases magistrales cada vez más van quedando en el olvido, y la pizarra preferida para impartir clases es la práctica, en la que el estudiante es el artífice de su conocimiento y el desarrollador de sus propias conclusiones”. De esta manera, esta sala interactiva del conocimiento energético se ubica como una propuesta de desarrollo del conocimiento en la que el Distrito y la empresa privada se vinculan a la tarea de educar a los bogotanos.