Home

On Line

Artículo

"Protagonista de primer orden de la intelectualidad colombiana": El País

El diario El País, de Cali, hace un homenaje a la labor política del ex presidente, quien fue un lider con estilo "agudo y penetrante".

12 de julio de 2007

Durante su dilatada carrera como dirigente público, Alfonso López Michelsen se distinguió por su análisis muchas veces certero de la realidad nacional. Y por su aporte permanente a la buena marcha de los asuntos públicos de Colombia, surgidos de su brillante intelectualidad y su preocupación por el destino de la Nación que presidió entre 1974 y 1978.

Dueño de un estilo agudo y penetrante que tocó todos los aspectos atinentes a la política, las relaciones internacionales, la hacienda pública, la cultura e incluso la agricultura, el ex presidente López fue protagonista de primer orden de la intelectualidad colombiana durante la segunda mitad del Siglo XX y lo que va corrido del presente. Estudioso del derecho constitucional, encabezó una disidencia dentro de su Partido Liberal, que bajo el nombre de Movimiento Revolucionario Liberal se opuso al Frente Nacional, el pacto que los partidos tradicionales firmaron para tratar de dar fin a la violencia fratricida que entonces se originaba en la disputa partidista.

Fue ese movimiento el que le dio derecho a un sitio en el escenario de la política nacional, como uno de los ideólogos y dirigentes más importantes del país. Sus antecedentes lo mostraban como gran escritor, político inquieto, crítico inconforme y hombre de mundo. Y como el precursor de la agricultura moderna en el Valle de Upar, región de sus antepasados maternos y de la que después se convertiría en su primer gobernador, cuando fue creado el departamento de Cesar. Después del nacimiento del MRL, fue conocido por su independencia y como el líder de una nueva generación de políticos audaces que despertó la inquietud entre la dirigencia tradicional.

Esa experiencia le ganó el respeto del liberalismo y le preparó el camino para la Presidencia. El cuatrienio que ejerció la primera magistratura fue marcado por el esfuerzo para reestructurar el Estado, adecuándolo a su concepción liberal, acompañado de reformas tributarias que fortalecieron las arcas públicas y de uno de los períodos inflacionarios más agudos en la historia de Colombia. Ese fue uno de los más notables contrastes de su gobierno, bautizado por él como el ‘Mandato Claro’, en virtud de su categórico triunfo en las urnas, logrado como el primer gobierno electo tras el Frente Nacional.

Pero la entrega de la Presidencia no significó el fin de la carrera pública de López Michelsen. Por el contrario, a partir de entonces se convirtió en punto de referencia obligado cuando se trataba de analizar la convulsionada realidad colombiana y de encontrar salidas a los problemas del país. Así lo hizo hasta sus últimos días, ya fuera defendiendo su Partido Liberal en la plaza pública, participando en foros por la paz y la libertad de los secuestrados o emitiendo su opinión en su columna semanal.

Al registrar la muerte del ex presidente Alfonso López Michelsen, El Pais presenta sus condolencias a los familiares y allegados de quien será considerado por la historia como uno de los grandes personajes de Colombia.