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Hay muchas formas de medir la altura de un edificio con un barómetro. Lo mismo sucede con la búsqueda de fórmulas para el fin del conflicto

Semana
7 de septiembre de 2003

Esta anécdota podría aplicarse al informe sobre el conflicto armado colombiano que la ONU publicará esta semana y que ojalá nos ayude a salir del callejón.

La anécdota es de un inofensivo profesor a quien llamaron para atender la queja de un alumno descontento con la nota que había sacado en física. El creía que merecía un 10, pero el maestro le había puesto un 0.

El examen tenía una sola pregunta y era más bien sencilla (sencilla, claro está, comparada con otros intríngulis de la física). La pregunta decía: "Explique cómo determinar la altura de un edificio con la ayuda de un barómetro". La respuesta del estudiante fue: "Lleve el barómetro hasta lo más alto del edificio, amárrele una cuerda larga, haga bajar el barómetro hasta la calle, súbalo de nuevo, y mida la longitud de la cuerda. Esta longitud corresponde a la altura del edificio".

Ahora, esta es una respuesta interesante ¿pero merecía buena o mala nota? El alumno tenía un buen argumento para reclamar la máxima calificación, puesto que había respondido en forma correcta y completa. Sin embargo, una alta calificación supuestamente certifica que el alumno sabe bastante de física, pero la respuesta a la pregunta no confirmaba que así fuera.

"Con este dilema en mente -sigue contando el profesor Alex Calandra, la persona real que vivió esta historia- sugerí que el estudiante tuviese una segunda oportunidad para responder la pregunta. No me sorprendió que mi colega estuviera de acuerdo, pero sí me sorprendió que el alumno aceptara de inmediato.

"Así pues, le di 15 minutos para responder la pregunta, con la advertencia de que su respuesta debía demostrar algún conocimiento de la física. Al término de 10 minutos no había escrito nada. Le pregunte si deseaba rendirse, dado que yo tenía otra clase que atender, pero él dijo que no, que no se rendiría, que tenía muchas posibles respuestas a la pregunta, y que estaba pensando cuál de ellas sería la más acertada. Me excusé por haberlo interrumpido y le pedí que siguiera. En el minuto siguiente él rápidamente escribió su respuesta. Era esta: 'Lleve el barómetro a lo más alto del edificio. Deje caer el barómetro, midiendo el tiempo de caída con un cronómetro. Después, utilizando la fórmula d = _a.t2 (la distancia en caída equivale a la mitad de la aceleración por el cuadrado del tiempo transcurrido), calcule la altura del edificio'.

"En este punto le pregunté a mi colega si estaba dispuesto a rendirse. El hizo la concesión, y yo le di al estudiante casi la máxima nota. Cuando salía de la oficina, recordé que el estudiante había dicho que tenía varias respuestas al problema.

"!Ah sí! dijo el alumno. Hay muchas formas de saber la altura de un edificio con la ayuda de un barómetro. Por ejemplo, uno podría sacar el barómetro en un día soleado y medir la altura del barómetro, el ancho de su sombra, y la longitud de la sombra del edificio; y utilizando simple proporción, determinar la altura del edificio.

"Bueno, dije, ¿y las otras?

"Sí, dijo el estudiante. Hay una forma de medición básica que a usted le gustará. En este método, usted toma el barómetro y empieza a subir las escaleras. A medida que sube, coloca el barómetro sobre la base de cada escala, marca con un lápiz la altura alcanzada, y vuelve a colocar el barómetro sobre la marca, hasta llegar al piso siguiente. La suma de los pisos le dará la altura del edificio en unidades barométricas. Es un método muy directo.

"Claro que si usted desea un método más sofisticado, puede amarrar el barómetro a una cuerda, hacerlo oscilar como un péndulo, y determinar el valor de g (la aceleración de la gravedad), a nivel de la calle y a nivel del punto más alto del edificio.

"Finalmente, concluyó, si ustedes no me limitan a soluciones físicas, existen muchas otras respuestas, tales como llevar el barómetro al primer piso y golpear en la puerta del conserje. Cuando él abra la puerta, usted le dice: 'Querido señor conserje, aquí tengo un fino barómetro. Si usted me dice la altura del edificio, yo le doy este barómetro".

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