En el escenario geopolítico actual, la atención se centra en China, un gigante económico cuyo milagro de crecimiento desde la segunda mitad del siglo XX ahora se ve desafiado por una serie de tensiones y cambios fundamentales. La visita de Xi Jinping a Estados Unidos, en un intento por aliviar las guerras comerciales y la desconfianza, revela una relación tensa entre estos dos titanes.
La disputa tecnológica: centro de la tormenta
En el epicentro de la disputa se encuentra la cuestión del acceso a la tecnología y el control de la cadena de suministro de semiconductores. Xi Jinping ha llevado a cabo una serie de medidas implacables contra el sector privado en China, regulando de manera exhaustiva los sectores tecnológicos y educativos. La incertidumbre es tan palpable que el paradero del destacado emprendedor chino, Jack Ma, fundador de Alibaba, es desconocido.
Innovación y desafíos en la política de comando central
China, que una vez fue un país con el PIB comparable al de Ghana o Pakistán en la década de 1980, experimentó un milagro económico gracias a la apertura y liberalización liderada por Deng Xiaoping. Sin embargo, la pregunta crucial surge ahora: ¿cómo innovar cuando ya no se tiene un referente claro? La política de comando central, que ha disminuido el número de empresas privadas y concentrado el poder en torno a Xi Jinping, parece ser un obstáculo para la innovación genuina. El exceso de medidas en la pandemia debilitó la transición de China de una economía basada en las exportaciones a una que se enfocara en el consumo interno. El grueso de la población china sigue siendo pobre, del orden USD 12.000 de PIB per cápita.
El enfoque de Xi en convertirse en la fuente mundial de maquinaria barata
Xi Jinping busca consolidarse como la fuente de maquinaria barata para la industrialización de diversos mercados emergentes. A través de alianzas comerciales y la inversión en infraestructura en África, América Latina y países involucrados en la nueva Ruta de la Seda, China busca extender su influencia y utilizar sus reservas para fomentar el desarrollo en regiones bajo su ala.
Desafíos en el mundo desarrollado: oportunidades de reinvención
Mientras tanto, en el mundo desarrollado se enfrentan a una realidad económica que necesita reinventarse. Las cadenas de valor, manufactura y energía requieren una nueva aproximación, presentando oportunidades de inversión en un contexto de volatilidad. Biotecnología, mano de obra automatizada, crypto, inteligencia e internet de las cosas pueden crear una convergencia tecnológica que cambie el juego por completo.
La volatilidad como oportunidad: perspectivas de inversión a largo plazo
Si bien la volatilidad es la reina en este escenario, nos encontramos en uno de los contextos más interesantes para invertir a largo plazo. Con China liderando la industrialización de los emergentes y el mundo desarrollado buscando reinventarse, se abren numerosas oportunidades en el mundo de las acciones.
En este complejo tejido geopolítico y económico, la clave radica en identificar y aprovechar las oportunidades que surgen en medio de la incertidumbre. Estamos en un momento de redefinición, y aquellos que comprendan las dinámicas emergentes pueden encontrar un terreno fértil para la inversión estratégica y el crecimiento a largo plazo