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Carlos Iván Pérez

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¿Hoy no piensan en el suicidio?

Los jóvenes que creemos en la educación queremos aportar algo más que el voto. Si no nos van a ayudar, al menos no nos perjudiquen.

24 de marzo de 2023

El gobierno actual vendió la idea populista de condonar las deudas de los créditos educativos que son emitidos por el Icetex. Hoy en día no sólo reconoce la inviabilidad de sus promesas, peor aún, la entidad estatal está desorganizada y como consecuencia de ello, miles de jóvenes necesitan medidas inmediatas y efectivas contra el incremento de sus tasas de interés.

“La deuda del Icetex hay que condonarla. La mitad de los que tienen crédito Icetex estudiando se van de la universidad y no terminan. Varios piensan en suicidio y quita el tiempo del emprendimiento una vez se termina la carrera para pagar la deuda. Lo que yo pienso hacer con el Icetex es condonar la deuda y llevar el Icetex hacia el crédito de estudios en el exterior”, fueron las palabras que utilizó en la Universidad Externado de Colombia el entonces candidato y ahora presidente, Gustavo Petro, para dar a conocer lo que se convertiría en una seductora promesa electoral. (Ver enlace: https://twitter.com/petrogustavo/status/1508834899393982472?s=48&t=kWLH0J_vey5nMFLK2XSuAQ).

Como era de esperarse, la popularidad del proyecto político en la población juvenil y en su núcleo familiar creció de manera exponencial, siendo uno de los factores principales para su victoria en las urnas. Al poco tiempo de llegar al poder, el Gobierno anunció la inviabilidad de la propuesta, el costo de materializar dicha locura es demasiado grande para Colombia a pesar de lo hermoso que suene. Como paños de agua tibia se anunció la voluntad de condonar a más de 4.000 deudores (aún no se materializa nada cercano a esa cifra) por medio de un acuerdo que firmó el gobierno de Duque, eso se traduce en poco o nada de cumplimiento a los jóvenes de parte de la actual administración.

El caso de Gabriel Boric, presidente de Chile, es bastante parecido al del presidente Petro. Durante campaña prometió condonar el Crédito con Aval del Estado, conocido como CAE, que tiene un papel similar al del Icetex en Colombia. Sin embargo, una vez llegó a la presidencia, reconoció la imposibilidad de cumplirlo, desconociendo la esperanza de miles de estudiantes que creyeron en sus palabras. Es triste que la necesidad sea una de las herramientas del populismo. Ambos homólogos mostraron una impecable instrumentalización del voto joven.

Pero en el caso de Colombia lo más grave no es la conducta desleal de prometer lo imposible, es la desorganización del Icetex. Miles de beneficiarios han visto el incremento desmesurado de los intereses y un abono a la deuda casi nulo. El presidente del Icetex, Mauricio Toro, declaró que la situación compleja que viven casi 90.000 afectados se debe a la subida del IPC, algo fuera de su control.

En mi opinión, fue tan alegre y efusiva la manera en que se refirió a la crisis que resultó ofensiva. (Ver enlace: https://twitter.com/villanueale/status/1632090153458999296?s=48&t=kWLH0J_vey5nMFLK2XSuAQ)

Es cierto, los distintos tipos de préstamos que ofrece la entidad, en su mayoría, están sujetos a una tasa variable relacionada al IPC anual mediante la Ley 1547 de 2012. Este indicador de la inflación está por las nubes en 2023… como era de esperarse. Según las proyecciones económicas del Dane y el Banco de la República era predecible el panorama que estamos viviendo. El Icetex no pudo coordinar un plan de contingencia por tan “inesperado evento” y de manera cínica nos invita a alabar su “plan de choque” que en realidad deja por fuera a aproximadamente el 10 % de su casi millón de usuarios. Es inminente la imposibilidad de pagar de un gran grupo, los deudores jamás lograrán culminar con su obligación si todo se va en intereses y nada se abona a la deuda. Queda en duda si fue por negligencia o improvisación, pero el fallo es innegable.

¿Por qué se habla tanto de los créditos al exterior y tan poco de esta situación? ¿Qué medidas inmediatas y eficientes va a tomar el Icetex para ayudar a todos los damnificados? ¿Cómo va a prevenir que se perpetúe la vulneración? ¿El escenario que vivimos es irrepetible? ¿Es este el escenario para replantearse la estructura de la entidad? ¿Es una falla de aritmética contractual? ¿Pérdida de conmutatividad o desequilibrio económico o qué carajos?

Resulta cuestionable la actitud de este gobierno con la educación. Desde que acapararon el poder han impuesto una serie de reformas agresivas y controversiales que aumentan el tamaño del aparato estatal y el gasto público. No obstante, para la educación no ha habido nada realmente significativo, sólo el despido déspota de uno de los pocos ministros capacitados en el gabinete.

Los jóvenes que creemos en la educación queremos aportar algo más que el voto. Si no nos van a ayudar, al menos no nos perjudiquen.