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La ciberbanca

Las operaciones bancarias por Internet se han incrementado en el último año. Solo en transacciones monetarias, el servicio que ofrecen los bancos ha pasado del 32 por ciento en 1998 al 87 por ciento en el 2003. Patricia Cárdenas, directora de Asobancaria, escribe sobre la consolidación que ha logrado la banca electrónica y las ventaja que puede traer para los negocios a nivel mundial.

Semana
11 de abril de 2004

Internet se ha convertido en uno de los medios de comunicación con mayor desarrollo en los últimos años. Ello ha hecho que temas como el comercio electrónico y la banca por Internet sean el día a día de un número de usuarios cada vez mayor, que han encontrado en este servicio su mejor aliado para optimizar el tiempo, entre otras razones.

El sector financiero colombiano ha sido actor principal de este desarrollo mediante un proceso integral de modernización de los medios de pago electrónicos, orientado, primordialmente, hacia el mejoramiento del servicio que se le presta a los clientes, un mayor cubrimiento, nuevas opciones para la realización de transacciones y mayores niveles de seguridad y eficiencia. Como resultado de esta estrategia, los productos y servicios asociados a nuevas tecnologías vienen presentando un aumento considerable frente a los canales tradicionales.

En Colombia el número de usuarios que acceden al servicio de Internet ha crecido en los últimos años y para junio de 2003 llegó a 2,732,201 (según datos de la Comisión de Regulación de Telecomunicaciones, CRT, de junio 2003), lo que significa que el 6.1% de la población colombiana tiene acceso a esta tecnología.

Uno de los mayores avances en el desarrollo de Internet de la banca colombiana ha sido la implementación de transacciones monetarias. Mientras en 1998 sólo el 32 % de los bancos ofrecía este servicio, a finales del 2003 lo hacía el 87%. El número de transacciones ha subido de manera vertiginosa durante los últimos años, pasando de 10,000 transacciones mensuales, a finales de 1998, a 11,514, 454 mensuales, a 31 de diciembre de 2003 . Estas fueron realizadas por aproximadamente 748,647 clientes de las diferentes entidades, lo que significa que en promedio cada cliente realizó 12.8 transacciones mensuales. Sin embargo, al igual que en periodos anteriores, las transacciones no monetarias siguen siendo el renglón con mayor participación dentro de las transacciones efectuadas en el periodo evaluado, con un 75.2% del total. Es importante aclarar que las transacciones ofrecidas actualmente por las entidades incluyen consultas de extractos, transferencias entre cuentas de la misma entidad o entre diferentes entidades, pagos de servicios públicos, tarjetas de crédito, créditos, entre otros.

Otro punto para destacar es el crecimiento que ha tenido Internet frente a otros canales electrónicos como el audioservicio, los cajeros automáticos y el sistema de transferencias electrónicas entre entidades, entre otros: aproximadamente el 17.2% de las transacciones realizadas por clientes del sector se refiere a Internet, lo cual equivale a un aumento del 59.1% en uso de este canal frente al año 2002.

El comercio electrónico se ha convertido en una de las formas más populares en el mundo para hacer negocios. En la banca colombiana, de acuerdo con las cifras obtenidas, el 43.5% ofrece a sus clientes algún tipo de solución de comercio electrónico. A diciembre de 2003 se habían expedido 6,939 tarjetas virtuales de crédito y débito para la realización de compras a través de Internet. Las entidades también están ofreciendo a sus clientes la posibilidad de hacer compras con cargo directo a sus cuentas corrientes o de ahorro, o con cargo a la tarjeta de crédito tradicional. A través de este sistema, los clientes de las entidades financieras realizaron 56,392 transacciones durante el año 2003, por un monto de $20,342 millones, cifra superior en más de diez veces frente a lo registrado durante el año anterior.

El 52.2% de las entidades financieras cobra comisión por la realización de algunas de las transacciones por Internet. En general, la cuantía de la comisión a pagar depende del tipo de transacción que se vaya a realizar. En el caso de las consultas de saldos y los pagos de servicios públicos, tarjetas de crédito u otro tipo de pagos, la comisión se encuentra entre los $300 y los $1,000. En el caso de las transferencias, la comisión se encuentra entre los $600 y los $3,000. En el caso de banca empresarial, el 47.8% de las entidades no cobra tarifa alguna y el 52.2% restante tiene esquemas tarifarios diferentes. En algunos casos, la tarifa consiste en un cargo fijo mensual independiente del número y clase de transacciones realizadas, que varía entre los $27,000 y $75,000; en otros, existe un cobro fijo para cada transacción (o para algunas como transferencias y nómina), que oscila entre los $1,000 y $7,000 y en otros hay un esquema mixto de un cobro fijo mensual más una tarifa por transacción.

Para los clientes, utilizar este canal significa poder realizar transacciones en cualquier momento sin tener que desplazarse y disminuyendo el riesgo de ser víctima de delitos como el asalto o el paseo millonario, pues no se está manipulando efectivo. Asimismo, el uso de Internet permite descongestionar las oficinas de las entidades que hoy en día se ven llenas de clientes cuyas transacciones pueden ser efectuadas por otros canales.

Paralelamente al desarrollo de los aplicativos transaccionales en las páginas web, las entidades están aplicando los niveles óptimos de seguridad que se necesitan para resguardar la información que los usuarios requieren en la utilización de este canal electrónico, como mecanismos de encriptación de información, intercambio de llaves públicas y privadas, entre otros. Adicionalmente, se han hecho campañas dirigidas a los clientes con el fin de dar a conocer las medidas preventivas que deben tener en cuenta cuando utilizan los canales electrónicos, incluyendo Internet.

Es evidente el crecimiento que ha tenido la banca por Internet en nuestro país, lo que se ve reflejado en el aumento del número y valor de las transacciones. Sin embargo, aunque existe la infraestructura tecnológica que garantiza la seguridad de las operaciones, y aunque los beneficios para los clientes y para los bancos son varios, todavía se presentan factores culturales que impiden aumentar la confianza de los usuarios en este instrumento. Además, el bajo índice de penetración de Internet en Colombia ( 6.1% de la población) comparado con los niveles de países desarrollados (más del 40% de la población), indica que el potencial de crecimiento de este canal electrónico es muy importante para la banca.

Ello significa que es importante continuar trabajando desde todos los frentes (sector financiero, industria, gobierno) para promover la masificación de este canal, de tal manera que se superen las barreras culturales y se alcancen los beneficios esperados del comercio electrónico y la banca por Internet.

* Presidente de Asociación Bancaria (Asobancaria)

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