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¿Permiso para abortar a la carta?

Más ético sería que una mujer tuviera a su hijo si lo quiere tener, independientemente de que la ley le dé permiso para castigar sus inferioridades físicas

Semana
13 de mayo de 2006

Debo decir públicamente que habría preferido que el aborto en Colombia se hubiera despenalizado en su totalidad, sin causales, ni cortapisas, ni requisitos, en lugar de haberlo despenalizado en estas tres causales que de alguna manera les calma la conciencia a quienes, en el fondo, saben que aquí se está violando el derecho a la vida.

Mucho menos hipócrita habría sido dejar esta alternativa del aborto como una prerrogativa general de la mujer, para que ella, de acuerdo con sus circunstancias y sus convicciones religiosas, tomara su decisión, con la única limitación de su conciencia, en lugar de la de la ley. Y les voy a enumerar mis razones.

1- La confrontación con la Iglesia Católica habría sido de las mismas dimensiones. En su decisión de proteger la vida no existen excepciones o matices. Las causales autorizadas por la Corte Constitucional no lo serán jamás para la Iglesia, que, como ya se hizo evidente, no considerará autorizada jamás a una mujer para quitarle la vida a su hijo ni siquiera por que la ley no se lo penalice en determinadas circunstancias.

2- El lío de reglamentar qué significa "peligro de la vida de la madre", o el de determinar cuándo ha existido evidentemente una violación o cuándo la vida del feto es inviable, abrirá otro boquete de infinitas dimensiones en nuestra legislación. Por cuenta de estas tres causales, no habrá mujer en Colombia que no consiga una causal a su medida para abortar. ¿Acaso la tragedia de traer al mundo a un hijo no deseado no amenaza con dejar profundas secuelas en la salud mental de la madre, y por lo tanto quedaría incluida en la primera causal? ¿Está la ciencia médica en capacidad de diagnosticar el peligro inminente en la vida de la madre o se corre el azar de permitir el sacrificio de una vida por cuenta de un diagnóstico apenas probable? ¿Habrá alguna autoridad judicial encargada de revisar los diagnósticos médicos para preservar el derecho a la vida del niño que viene en camino y evitar que las recetas médicas de profesionales inescrupulosos se vuelvan un nuevo y productivo negocio?

3- Si el fallo de la Corte tiene efectos inmediatos, pero una madre que desee abortar bajo la causal de violación está obligada a presentar la correspondiente denuncia penal, ¿qué prevalecerá? ¿El derecho a abortar o la obligación de la justicia de confirmar previamente que sí existió el delito de violación? ¿Y si la mujer aborta y se descubre que no fue violada? ¿Y si finalmente no aborta mientras espera el fallo y se confirma que fue violada? ¿Cuántas adolescentes no recurrirán a esta causal para salir de su 'afán'? ¿Cuántos adolescentes o jóvenes que dejan embarazada a una niña por cuenta de la irresponsabilidad o de una escasa educación sexual, no serán en el futuro graduados de violadores por una compañera sexual ocasional?

4- ¿Qué quiere decir que se podrá abortar cuando el feto sea inviable? ¿Que no pueda vivir fuera del seno de su madre o que tenga un retraso cerebral, una parálisis, una ceguera, una sordera, le falte un miembro, o por ejemplo, padezca el síndrome de down, que trae al mundo niños con una discapacidad que son dulces y tiernos en extremo, y que en buena parte de los casos son recibidos con adoración en el seno de sus familias?

Quizá lo que más me molesta de que el aborto se haya convertido en un problema de causales en lugar de que sea lo que es de verdad en el fondo: un asunto que depende fundamentalmente de la decisión de una mujer, sin causales que lo justifiquen, es este tercer caso. El de que en el futuro una raza superior será la que determine cuáles son los seres humanos que tienen derecho a la vida porque "están completos" y cuáles no, porque están "incompletos" o son imperfectos. El nazismo en todo su esplendor.

Más ético sería que una mujer tuviera a su hijo si lo quiere tener, independientemente de que la ley le dé permiso para castigar sus inferioridades físicas.

Incluso en las películas futuristas esta posibilidad se ha planteado con frecuencia en un planeta en el que algún día sólo van a caber las razas superiores. Sólo que para esas alturas, ya va a existir una Policía estatal encargada de hacer esa purga.

Por todas esas razones, yo habría preferido que el aborto en Colombia no hubiera tenido ningún condicionamiento. Porque lo que quedó es lo mismo, sólo que para evitar el peso de la ley hay que acomodarlo a través de certificados médicos turbios, de denuncias falsas o de la dudosa felicidad que en adelante le producirá a una madre que desea abortar, descubrir que su hijo viene al mundo con un defecto físico.

ENTRETANTO… ¿La doctora Elsa Lucía Arango no tendrá un tiempito para atender al candidato Carlos Gaviria, que también necesita goticas para la irritabilidad?

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