Home

Opinión

Artículo

SILVIA PARRA

¿Quién se está comiendo la Manzana?

Aunque el Imperio tecnológico de Apple aún goza de buena salud, en los últimos meses ha ido perdiendo su esplendor.

Silvia Parra, Silvia Parra
3 de mayo de 2013

Había una vez un rey cuya imaginación parecía no tener límites. Reinaba en el mundo de las tecnologías y la palabra “innovación” era de su uso exclusivo. Nadie parecía hacerle sombra. Hasta que un día, el rey murió, el caudillaje dejó de cautivar a sus más fieles seguidores y los años dorados de aquel majestuoso Imperio comenzaron a derrumbarse.  

Quién hubiera imaginado que el aire de invencibilidad que había rodeado por siempre al rey de la tecnología durante los últimos años podría llegar a estallar en mil pedazos. Aunque el Imperio tecnológico de Apple aún goza de buena salud, en los últimos meses ha ido perdiendo su esplendor.

El mismo Tim Cook tuvo que reconocer recientemente lo que Wall Street llevaba medio año anunciando, el final de un ciclo dorado de crecimiento que lo convirtió en la empresa más rentable del mundo tras el éxito del iPhone y el iPad.

El año pasado la compañía llegó al clímax cuando rompió el récord de 700 dólares por acción en la bolsa y logró convertirse en la empresa con mayor valorización. Este año Apple vive la primera caída de sus ganancias trimestrales en casi 10 años, registró 18% menos que en el mismo período en el 2012. Hoy, no sólo ha perdido el título de “la compañía más rentable del mundo”, sino que sus acciones han marcado, por primera vez desde el 2011, un valor por debajo de 400 dólares. En apenas 52 semanas, Apple ha perdido el 43% de su capitalización de mercado, unos 21.800 millones de dólares. ¿Qué está pasando? ¿Quién se está comiendo la manzana? Los críticos de tecnología se dividen las hipótesis. 

Abre el telón… iPhone 5, hmm… mejor cierre el telón.

Tras dos largos años de incertidumbre y expectativa por el innovador retoño de Apple, la gigante de la innovación abrió el telón para mostrar su iPhone 5, que para importantes medios de tecnología fue una gran decepción. La revista Wired lo definió como un teléfono “terriblemente aburrido”; CNET, tras conocer el nuevo dispositivo, expresó “con el iPhone 5 Apple les abre las puertas a sus rivales”, y la conclusión de The Verge fue: “Hay mejoras, pero un montón de similitudes”.

Y es que tanto consumidores de la Manzana como periodistas y críticos de tecnología veníamos acostumbrados desde la Era Steve Jobs a esperar con ansiedad cada innovación de Apple que se  asociaba  a “abrir la puerta” a  un mundo desconocido y cada vez más fascinante. La empresa presentaba sus productos hacia el primer trimestre del año. Desde los terribles descaches, la compañía no ha anunciado oficialmente ninguna novedad, mientras sus rivales siguen lanzando dispositivos que no tienen mucho que envidiarle.

Es que esos Mapas... 

Mucho se ha dicho y escrito sobre el episodio de los mapas fallidos de Apple, por los que la empresa tuvo que terminar disculpándose. El error fue garrafal no sólo porque carecía de los beneficios que su principal competencia, Google Maps, brindaba, sino peor aún, muchos de esos datos eran incorrectos, mal traducidos. Confundía Tokio con Londres, Beijing con Madrid, y situaba Berlín en la Antártida; en Bogotá, el Centro Comercial Andino estaba en el centro de la ciudad y el “spanglish” era un “must” en todas las búsquedas: “Search calle 80 con avenue Boyacá”.

Fue una gran oportunidad desperdiciada por Apple, cerró una puerta con gran  potencial para la publicidad. Lo sabe Google, lo sabe Foursquare y lo sabe Waze, que hace unos meses introducía su peculiar forma de publicidad (si el usuario quiere ir a una estación de servicios, no se le guía a la más cercana, sino a la más cercana que haya pagado).

¿Muy caro? 

Ahora se escucha a los grandes operadores en Europa decir que el iPhone es “demasiado caro” para los europeos. El último fue Stephane Richard, consejero delegado de France Telecom, en una entrevista a Bloomberg. Y eso parece ser lo que está ocurriendo, al menos en el Viejo Continente, donde  la cuota de mercado de iOS es muy inferior a la de Android en teléfonos inteligentes. Y en países más afectados por la crisis, como España, iOS sólo tiene el 6% del mercado, frente al 86% de Android.

El demonio para Apple

A Apple la cogieron débil y hoy está puesta en jaque por otra gigante del Nasdaq, Google. Esta última, con su sistema operativo Android, abierto a varias plataformas, ha ido debilitando a iOS, el sistema operativo del iPhone, cerrado sólo a dispositivos de la Manzana; la historia de los mapas de Apple vs. los de Google Maps; el reciente lanzamiento de Google Now, que vino a hacerle sombra al Siri de Apple, y el nacimiento de los Galaxy SIII y SIV de Samsung con sistema operativo Android, han puesto contra la pared a Tim Cook y a su equipo de ingenieros que después de la muerte de Steve Jobs, la depreciación en bolsa, la presión de los medios, el hambre de los applemaníacos y la batalla judicial contra su competencia, no han hecho sino desconcentrarlos y hacerles perder el rumbo. 

Para muchos, el hecho de que la compañía saliera al mercado con un producto “medio crudo” no podía ser otra cosa que un  mal indicio de lo que vendrá después. Algunos se preguntan: ¿Será que estas mismas fallas van aparecer en otros programas o dispositivos? ¿Apple estará “perdiendo su rumbo” bajo el liderazgo de Tim Cook? ¿Qué pasó con la magia?  

El mercado ya no es lo que era antes y mantenerse arriba es cada vez más difícil. La competencia no descansará, así que para que no se le coman toda la manzana, Apple deberá no desanimarse, sino demostrar que todavía tiene la capacidad de reinventarse y sorprender al mundo con un producto mágico revolucionario, con precios razonables, que enamoren y enganchen nuevamente a los que en algún momento fueron sus fieles consumidores. En palabras de Steve Jobs: “Cuando se innova, se corre el riesgo de cometer errores”. Así que es mejor admitirlo rápidamente y continuar con otra innovación.