Seguiremos en la tarea

Ha valido la pena. A mediados de 2011, el presidente Santos me invitó a la Casa de Nariño a presentar la investigación sobre la influencia de fuerzas ilegales en las elecciones para gobernadores y alcaldes. Estaban los ministros del Interior y de Defensa, el director de la Policía y el comandante de las Fuerzas Armadas, los jefes de organismos de inteligencia y otros funcionarios del alto gobierno. 

Se trataba de una indagación realizada por 67 investigadores en 80 municipios y 23 departamentos bajo la dirección de Claudia López y Ariel Ávila. Habíamos recibido el respaldo del Instituto Nacional Demócrata de los Estados Unidos y realizado un convenio con el Ministerio del Interior para adelantar el trabajo. 

Le mostré al presidente una lista de 126 candidatos a las alcaldías y gobernaciones que podrían ganar las elecciones gracias al apoyo de bandas criminales o de fuerzas guerrilleras. Ya había tenido un examen y depuración por parte de agentes de inteligencia del Estado. 

Era una situación alarmante que comprometía a ciudades principales y departamentos de primer orden. El primer mandatario pidió explicaciones e hizo diversas aclaraciones y cuestionamientos, pero al final ordenó la entrega de la lista a los partidos políticos. Luego esta información salió a los medios de comunicación y generó un gran debate. 

Vuelvo a contar esta historia porque creo que la reunión fue un hecho extraordinario. Como lo había sido años antes la decisión de la Corte Suprema de Justicia de tomar nuestras investigaciones para iniciar procesos judiciales contra un numeroso grupo de parlamentarios. 

Nunca había pasado por mi cabeza la idea de que indagaciones de tipo académico le pudieran servir al Estado para tomar decisiones trascendentales para la democracia. En los días de miedo o desazón, recurro a estos recuerdos para darme ánimo y seguir en la tarea junto al equipo de personas que me han acompañado desde hace ya una década.

A dos años de las elecciones locales podemos ensayar un primer balance. Alertamos junto a otras organizaciones sobre el complot que había fraguado Juan Carlos Martínez Sinisterra para sacar al candidato a la Alcaldía de Cali Rodrigo Guerrero de la contienda electoral y logramos que volviera a la competencia. También señalamos la perversa influencia que venían ejerciendo algunas fuerzas ilegales en la campaña por la Alcaldía de Medellín y generamos un ambiente que limitó el alcance de estas intervenciones fraudulentas. 

Algunos partidos le retiraron el aval a varios candidatos señalados. Otros recibieron cuestionamientos públicos, pero mantuvieron su aval acudiendo al amparo legal del Consejo Electoral. De la lista entregada al presidente Santos, nueve candidatos a Gobernación alcanzaron la victoria.  

De estos ya han sido destituidos tres: Cielo Correa, gobernadora del Huila; Nelson Mariño, gobernador del Casanare; y Héctor Fabio Useche, gobernador del Valle; así mismo, Francisco Gómez Cerchar, gobernador de la Guajira, afronta diversas investigaciones que lo pueden llevar a la destitución y a la cárcel. Ahora bien, no sería exacto decir que han sido separados del cargo por irregularidades en su elección, pero sí por hechos de corrupción que devienen de su relación con fuerzas corruptas e ilegales. También hay acciones e investigaciones sobre 26 alcaldes. 

Las consecuencias de las investigaciones, nuestro rechazo frontal a todas las violencias y el respaldo decidido a las negociaciones de paz para encontrar la reconciliación han suscitado siempre amenazas y presiones. En estos días, la cosa ha ido a mayores con un plan criminal develado por el gobierno. Da miedo, mucho miedo, esta situación. Pero no nos van a silenciar. Tenemos la esperanza de que la fuerza pública y la Justicia puedan contener a estas fuerzas.

Para hacer más eficaz nuestro trabajo hemos buscado nuevas alianzas y las hemos encontrado. Con María Elvira Bonilla, Rafael Santos y un importante grupo de periodistas vamos a lanzar el portal Las2orillas y en asocio con nuevos investigadores hemos formado la Fundación Paz y Reconciliación.

La columna en SEMANA y el programa La Controversia en Canal Capital serán siempre espacios independientes y críticos para seguir luchando por sacar la violencia y la corrupción de la política y construir una democracia profunda en un país ansioso de cambios.

En medio de la zozobra, siento una inmensa gratitud con las autoridades, con los medios de comunicación y con las miles de personas que nos han acompañado.