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VERDADES DE LAS PROXIMAS ELECCIONES

Las encuestas arrojan una diferencia abismal entre la popularidad de navarro y la de su movimiento.

Semana
29 de julio de 1991

A NO SER QUE LAS PERSPECTIVAS ELECtorales den un súbito vuelco, la suerte prácticamente está echada para los distintos sectores que intervendrán en las próximas elecciones. Si hubiera que decirlo en una frase la cosa sería así: el M-19 sobrevivirá, Andrés Pastrana arrasará, el Movimiento de Salvación Nacional declinará y el liberalismo perderá sus mayorías absolutas.
El M-19: para todos los partidos y movimientos, las próximas elecciones presentan unos denominadores comunes que hacen tan predecibles los resultados. El primero de ellos es que por la presencia del tarjetón, los nombres de los aspirantes van a ser definitivos. Los votos serán arrastrados por caudillos pero, irónicamente, estarán ausentes los principales caudillos del momento, como Ernesto Samper, Alvaro Gómez y Antonio Navarro. Sin embargo, si esta ausencia de caudillos es manejable en el liberalismo, que tiene una maquinaria aceitada desde hace medio siglo, tiende a ser grave en el M-19 y en el Movimiento de Salvación Nacional.
Las encuestas arrojan una diferencia abismal entre la popularidad de Antonio Navarro, individualmente considerado, y la popularidad de su movimiento. Eso significa que también habrá una diferencia categórica entre unas elecciones con Navarro, y unas sin Navarro. Inteligentemente, el M-19 lo ha registrado, y tal parece que ha optado por no dejarse contar, para en cambio disfrazarse a través de unas coaliciones multipartidistas, estilo Carlos Albornoz (conservador) en Pasto, y Fuad Char (liberal) en Barranquilla, que le permitirán sobrevivir dignamente, evitando una catástrofe electoral. El M-19 intentará combinar su prestigio como movimiento sin caudillo, con el de los caudillos sin movimiento.
SALVACION NACIONAL:la ausencia del nombre de Alvaro Gómez en la lista de Salvación Nacional también

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