RAÚL ÁVILA
Liderazgo laboral en la pandemia
Solemos necesitar con más ahínco a un líder en tiempos de incertidumbre. Es indispensable tener a unos grandes líderes en un panorama pandémico que, ahora, les demanda ser expertos, gestores, impulsores de cambio y rodearse muy bien a la hora de la toma de decisiones.
Somos muy pocas las personas que corremos con la suerte de estar trabajando desde nuestros hogares. Puede que en algunos momentos la monotonía y el confinamiento nos genere espacio a pensar que nuestras tareas se forjan como triviales e irritantes (no solo las laborales), pero no debemos demeritar lo afortunado que somos por tener esta posibilidad ante lo que la mayoría vive día a día. Sin embargo, seguir en marcha bajo el contexto actual no está nada fácil, y se está generando una disrupción en las relaciones laborales que marca un nuevo desafío para los empleados y para los empleadores.
Ante la sensación de desasosiego de muchas personas, los líderes deben estar para ayudar a su gente a superar los tiempos difíciles. Entrenar y liderar a las personas mientras estas reevalúan sus vidas para adaptarse al contexto actual, es uno de los grandes retos para los líderes de las organizaciones actuales.
Hay que tener en consideración que este tipo de “teletrabajadores” está apartado físicamente de sus colegas, de sus clientes, de su lugar de trabajo habitual. Muchos se encuentran solos en sus casas mirando una computadora gran parte del día, mientras de vez en cuando obtienen un acercamiento remoto con aquellos con quien solían compartir su tiempo regularmente. En realidad, es una ruptura total de la rutina a la que estaban acostumbrados.
La revista Harvard Business Review (HBR), experta en análisis organizacional, ha recopilado en sus más recientes artículos algunas recomendaciones a seguir para quienes tienen personas a su cargo mientras intentan continuar operando.
Para empezar, es muy importante pensar en cómo puede servir a las personas que dirige. Tomarse el tiempo de comunicarse con ellas bien sea por llamadas telefónicas o videoconferencias, hace la diferencia y, aún más, cuando se les pregunta cómo están y si requieren de alguna ayuda de parte de su líder. Es trascendental hacer lo que pueda para conseguirles lo que necesitan, incluso si se trata de cuestiones fuera del ámbito laboral.
Los buenos líderes encuentran cómo servir a sus empleados en la medida en que exploran y se dan la oportunidad de crecer, proporcionando, en paralelo, apoyo tangible y emocional en el camino. Diversas investigaciones reflejan que a la percepción de un mayor grado de compromiso de su parte como líder, le acompaña un mejor desempeño por parte de sus trabajadores ya que están dispuestos a dar la milla extra en su labor.
Por otro lado, un gran líder puede ayudar a descubrir el propósito personal en cada uno de sus empleados durante estos tiempos de incertidumbre. Ante el desprendimiento de la rutina habitual y los guiones de trabajo a los que se recurría, brinde un espacio para discutir con sus empleados si alguno de los elementos básicos de su trabajo ha cambiado, fomente un mayor acercamiento para que sientan la libertad de pedirle algo que necesiten para ser efectivos, y no pierda de vista alinear constantemente las tareas diarias de cada empleado con la misión y la visión de la organización.
Al mismo tiempo, si bien es importante reflexionar sobre los requerimientos y necesidades, también es crucial hablar sobre cuáles son los puntos fuertes de sus empleados y cómo pueden usarlos en su nueva forma de trabajar. Vale la pena revisar qué habilidades y talentos les gusta usar con mayor incidencia en su trabajo y qué les gustaría aprender. El crecimiento personal y profesional también hace parte de todo este proceso.
Y aunque lo ideal es sacar la mejor versión de líderes y empleados en esta redefinición laboral, muy a menudo se presenta la preocupación desde los líderes y/o gerentes acerca de que los empleados puedan separarse de su forma habitual de trabajar. Les preocupa que tareas como las del hogar irrumpan de manera significativa en el desarrollo de sus actividades, que aumente el número de tareas incompletas y que prioricen más hábitos asociados a la procrastinación.
No obstante, esto puede usarse como una oportunidad para dar a los empleados la libertad de ser ellos mismos y explorar sus talentos e intereses. Investigaciones conjuntas realizadas por la HBR en organizaciones sin ánimo de lucro, hospitales y call centers, revelaron que cuando los líderes alientan a los trabajadores a expresar sus intereses y fortalezas únicas, su desempeño mejora y el nivel de agotamiento disminuye.
Una vez los empleados empiezan a dar lo mejor de sí mismos en sus tareas laborales, se sienten más autónomos y su trabajo se siente mucho más significativo. Incluso, podría decirse que para los líderes esta es una oportunidad para empezar a valorar las ventajas del trabajo orientado a resultados, en lugar de atarse a valorar la jornada laboral por estrictos horarios de trabajo. No está de más brindar una mayor flexibilidad para que los trabajadores puedan suplir sus asuntos personales en esta época; esto generará un mayor compromiso de su parte para cumplir con las labores designadas.
El trabajo parece más importante cuando decidimos cómo se hace. Tener el apoyo de un buen líder en este tiempo de crisis tiene más significado del que parece, no solo para poder atender las contingencias en épocas de pandemia, sino también para reflexionar y saber reinventarse a nivel profesional y laboral en este momento de crisis. Adaptarse ahora es una necesidad, pero recuerde que no está solo en el proceso.
Hoy día, de nuevo debemos pensar en los que no tienen hogar, en los que salen a trabajar día a día fuera de sus hogares para que otros nos podamos quedar en casa, en los que nos cuidan, nos protegen y nos curan, a todo el personal médico, auxiliar de la salud, del gobierno, del transporte, del comercio, de seguridad, de los servicios públicos, bancario, de los domicilios, y a los que no nombre por omisión involuntaria: GRACIAS, ustedes también son los líderes que nos guían y nos dan fuerza para seguir adelante.