Opinión On-line

La emoción: “es el padre de sus acciones”

Recuerda un día de esta semana al despertar en la mañana ¿Cómo se sentía? ¿Qué emoción experimentaba? ¿Cuáles fueron los primeros pensamientos que llegaban a su mente? ¿Qué dialogo interior tuvo? ¿Cómo era su fisiología?, ¿con cuanta energía se despertó? Opinión de Andrés Cadena.*

Invitado , Invitado
16 de marzo de 2015

Cuando desayunaba, ¿qué fue sucediendo? y cuando iba de camino al trabajo y se vio atascado en el tráfico ¿qué sucedió con su enfoque? y a media que transcurría el día, ¿qué sucedió con su emoción, con su cuerpo? y cuando tuvo el primer inconveniente en su trabajo, ¿qué sensación experimentó? ¿Cómo era su lingüística? ¿Qué palabras usaba? ¿Cómo caminaba mientras llegaba a su primera cita, con mucha seguridad o con un poco de ansiedad? ¿Iba totalmente enfocado en lograr el negocio o quizás pensaba en los problemas que se le podrían presentar? Y cuando llegó y saludó a su cliente, ¿en qué emoción se encontraba? Y ya cuando estaba de regreso a su casa, ¿con cuánta energía regresaba sabiendo que lo esperaba quizás su hijo o su esposo/a?, ¿cómo los saludo? ¿Con cuanta energía? ¿En qué emoción se encontraba? Y cuando se fue a dormir, ¿qué pensamientos llegaron a su mente? y cuando se despertó al otro día, ¿cómo se sintió?

Toda estas preguntas seguramente si se las plantea diariamente, tendrían en muchas ocasiones respuestas diferentes ¿no es verdad? Sin embargo la pregunta que surge cuya respuesta es común para todos los seres humanos en todo el mundo es: ¿Qué buscamos en esencia los seres humanos? Y la respuesta es sentirnos bien, plenos, felices, no importa lo que haga, siempre estará buscando esto, y en este proceso de lograrlo, es claro que a veces siga los hábitos incorrectos como podría ser tomar y comer en exceso, fumar, gritar a la persona que ama, y aunque suena un poco contradictorio, ya que son hábitos incorrectos, estos buscan el mismo objetivo: sentirse feliz y en este punto se convierte en algo fundamental separar su conducta de la intención. Siempre la intención es sentirse feliz, aunque quizás su hábito no sea el adecuado.

¿Para qué quiere dinero en su cuenta? No solamente para tener un cumulo de billetes. En algún nivel de su vida sabe que el dinero le produce cierta sensación de felicidad o quizás seguridad o en algunas personas tranquilidad… ¿para qué compras un carro, una casa?, ¿para qué sigue algún tipo de doctrina si se da cuenta todo lo que hace tiene un objetivo común?: SENTIRSE BIEN y si lleváramos esto al ámbito de la negociación, podría decir con certeza absoluta que tanto como el que hace un cierre de venta, usando una frase como “¿hacemos el negocio?” como el que no lo hace y se queda quieto esperando que sea el cliente quien decida tomar la iniciativa. Ambos en este escenario están buscando sentirse bien. El primer asesor por la motivación que le produce lograr un cierre de venta (sentirse bien) y el segundo por el miedo que lo produce ser rechazado (sentirse bien). He conocido empresas que invierten millones de pesos en entrenamiento a sus fuerzas de ventas y aunque es algo muy valioso, lo es mucho más entender cómo funcionan los hábitos. De qué le sirve entrenar a un asesor en técnicas de ventas si este carece de la seguridad necesaria para lograr un cierre de venta con su cliente.

Llevo años entrenando a miles de personas en las compañías mas grandes del país e inclusive en otros países, he visto los mejores actuando y aplicando sus mejores técnicas, siempre con el objetivo claro de determinar qué es lo que los hace diferentes y qué es lo que los lleva a lograr resultados extraordinarios. Podría decir que se me ha convertido en una “obsesión” lograr responder estas preguntas. ¿Qué es lo que hace la diferencia en la calidad de vida de las personas?

Las mejores estrategias y los mejores planes de acción cobran realmente vida y tienen el impacto esperado cuando son construidos desde la emoción adecuada. Cuando hay emoción, todo cambia ya que las emociones generan lo que llamamos las acciones y estas los resultados. Intensidad Emocional es la clave de los mejores, es lo que hace que logren resultados extraordinarios.

Ver cómo hacen uso de las emociones a voluntad los grandes líderes empresariales, es algo realmente fascinante, es mágico verlos como se reponen a los diferentes “problemas” que tengan en su compañía, cómo logran acceder a estados de seguridad para lograr las diferentes metas y cómo disfrutan en estados de total felicidad cuando logran los resultados. Son maestros del uso de la fisiología (gestos, posturas, respiración) comprendiendo el impacto directo que tiene sobre sus emociones, así como logran mantener su enfoque siempre en los resultados, gobernando sus pensamientos a voluntad entendiendo la conexión directa que existe entre la mente y el cuerpo.

A lo que me refiero específicamente es a la habilidad emocional que han logrado desarrollar y cuando hago referencia a esto, lo que busco es que comprenda el impacto que tiene este habito directamente sobre sus RESULTADOS!!!


* Master&Trainer PNL
Creador Concepto Neuroemotion
Master Liderazgo