LA UNIDAD NACIONAL Y EL DEPORTE DEL PUPITRAZO EN EL CONGRESO
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No hay cosa más peligrosa que los gobiernos de unidad, cuando basados en acuerdos partidistas eliminan cualquier estudio alterno, discusiones y la oposición tan necesarios en el ámbito legislativo, que termina aprobando leyes a pupitrazo limpio. Este ha sido el factor común en los últimos dos meses, está pasando con muchas leyes de suma importancia para el país actualmente, como la reforma a la justicia, para solo citar una. Sobra decir que el fenómeno se ha repetido en todos los gobiernos en los últimos treinta años en Colombia desafortunamente.
La primera pregunta es donde está el partido liberal. Qué pasó con el partido verde, que gracias a acuerdos burocráticos, termino cediendo y ahora participará en la torta institucional, el partido conservador simplemente no existe o solo aparece para exigir ministerios. La batalla de sembrar discusiones y oponerse a esta aplanadora la está haciendo el Polo. Realmente no es bueno para el país ni mucho menos para el presidente.
Lo sucedido con la aprobación a raja tabla del TLC, fue un espectáculo grotesco que habla muy mal de nuestros congresistas. La discusión sobre el fuero, no es tan fácil ni tan plana como lo ven nuestros legisladores, la eliminación del control fiscal para altos dignatarios es muy peligrosa, el recorte de facultades al procurador y la evasión de cualquier control sobre la actividad de los congresistas encriptado en muchas leyes, para no decirle micos, que están actualmente en discusión, dice mucho más de la actual legislatura.
El buen momento del presidente Santos, por lo menos desde la prensa, debe traducirse en el respeto para con la oposición y en sembrar discusiones a favor de la democracia que eliminen el caudillismo de tan mala recordación por lo sucedido en los últimos ocho años.
Donde está el partido liberal, será que el partido conservador seguirá siendo solo un ente clientelista, como lo ha sido en los últimos veinte años. Qué pasa con el partido verde y por último, será que el polo arregla sus problemas internos. Donde está el país político en el buen sentido de la palabra.
