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LAS EPS CON LICENCIA PARA MATAR

Semana
9 de julio de 2011

UN NEGOCIO MACABRO QUE COBRA POR LOS QUE YA ESTAN MUERTOS Y GANA POR LOS QUE VA MATANDO

 

La corrupción en salud no es solo un delito de corrupción que cobra por servicios prestados a los  que ya están muertos, sino que también es un delito criminal que gana por matar, al no prestar los servicios demandados por los enfermos . Negarle la atención, atenderlo a destiempo o negarle los procedimientos o los medicamento necesarios, no solo es negarle el derecho fundamental a la salud, sino que para muchos de los enfermos que acuden a las EPS, es condenarlos a muerte.


Quien responde por estos asesinatos?. Nadie, absolutamente nadie. Hasta ahora se empiezan a procesar a agentes de las EPS, por asuntos de corrupción en el manejo de los dineros de la salud, pero a nadie se ha procesado ni se le esta procesando por las consecuencias de la corrupción; la muerte de millares de Colombianos, que han muerto o están muriendo a la puerta de hospitales y Clínicas o en sus casas, por falta de una atención o por una atencion  deliberadamente inadecuada.


La ley 100/94 que privatiza los servicios de salud y los convierte en un negocio, da patente de corso a las entidades y a los agentes de la Salud para ser desde negligentes, hasta criminales; al priorizar sobre el  derecho fundamental a la salud,  la mayor rentabilidad empresarial que como tal no tiene limites desde la óptica capitalista, y se hace a costa de no prestar o prestar mal el servicio; si a esta mentalidad de traficantes hay que agregarle la corrupción que se ha montado alrededor de ella, encontramos el  origen de lo que se puede considerar un crimen continuado.


Por estar involucrados el estado, los empresarios de las EPS, e incluso el personal medico que se presta a este juego de la muerte, asi sea por necesidad, es que hay total impunidad para los asesinos, a tal punto que a pesar de su evidencia, ni siquiera se le considera delito; y sus muertos LO SON DE MUERTE NATURAL!; Y sus autores, intelectuales y materiales, gente de bien!.


Atender los derechos fundamentales de la población es la obligación y razón de ser del estado y de allí la oposición a la privatización de los servicios que deben de ser públicos,entre ellos el de la salud, y el rechazo al neoliberalismo convertido en un verdadero cáncer, que busca dejar en manos de los intereses privados el manejo de los intereses públicos, lease ley 100, con resultados nefastos y suficientemente conocidos.