UNA MANO PARA ARMENIA

La iniciativa surgió del medico genetista Jaime Bernal, rector del Gimnasio Campestre, de
Bogotá, como reacción a los desastres dejados por el reciente terremoto en el eje cafetero. Convencido de
que es más efectiva una ayuda permanente que una efímera donación en dinero, Bernal decidió, en comunión
con la asociación de padres de familia del plantel, adoptar un colegio oficial de Armenia con el objetivo de
brindar no sólo asesoría pedagógica y sicológica en la zona a los alumnos afectados sino apoyo profesional
en diseño, arquitectura e ingeniería a las directivas en aras de recuperar las instalaciones que se vieron
gravemente deterioradas por el fenómeno natural.El colegio elegido fue el Luis Carlos Galán, y como primera
medida un grupo de 25 alumnos será invitado a Bogotá en las próximas semanas para asistir a un curso de
preparación intensiva para los exámenes del Icfes.La idea es que muchos de los colegios privados capitalinos
se unan a la campaña de manera que no sólo sea una sino varias las instituciones educativas adoptadas que
puedan salir de la crisis con la ayuda de sus hermanos bogotanos.