De héroes a víctimas: así se sienten médicos y enfermeras en Colombia | Foto: SEMANA

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De héroes a víctimas: así se sienten médicos y enfermeras en Colombia

El personal sanitario en Colombia denuncia discriminación social y falta de insumos médicos para trabajar de forma segura en emergencia de coronavirus

3 de abril de 2020

Varios profesionales de la salud denunciaron en Vicky en Semana que se sienten maltratados a pesar de estar poniendo su vida en riesgo para salvar a los demás.

Uno de los testimonios más impactantes es el de Cristian Botache, un profesional de la salud de medicina interna en Cali quien relató cómo fue sacado, literalmente, del lugar donde estaba viviendo por el temor de los vecinos por su labor. Y es que, cuando comenzó a crecer esta crisis en Colombia, fueron varios los que buscaron mudarse más cerca de sus lugares de trabajo para evitar, por ejemplo, tomar transporte público, uno de los focos de contagio del virus.

A los pocos días de aceptar la oferta de mudarse a un apartaestudio que le ofreció una conocida, llegó una avalancha de quejas de parte de los vecinos por su presencia. “La administradora me pide que me vaya del lugar, que había tenido buenas intenciones, pero que tenía que defender a los residentes del edificio”, narró Cristian.

“Fue denigrante, me sentí discriminado, no puedo manifestar cuán mal me sentí. Casi caí en una crisis de ansiedad, estaba frustrado. Ese día, afortunadamente, logré volver a donde unos de mis familiares, pero cada vez que veía los mensajes que lanzaban del personal de enfermería contando que les pasaba ese tipo de cosas, volvía a revivir la forma en la que me sentí cuando yo mismo fui discriminado”, agregó este médico internista en diálogo en Vicky en Semana.

A raíz de su caso, Cristian lanzó una campaña a la que denominó ‘Ayudo a quien me ayuda’, a través de la cual busca que las personas puedan contribuir ofreciendo, por ejemplo, lugares de estadía para el personal médico, o facilitar formas de transporte hacia los hospitales, entre otros.

Por su parte, César Burgos, quien hasta ayer fungía como presidente de la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas dijo sentir “desazón y zozobra por sentir que, no solo hay poco apoyo del Estado, sino también discriminación de la gente”. Añadió que lejos de ver como los colombianos de primera línea, se sienten “los enemigos de la sociedad” en este momento.

Añadió que la indumentaria es insuficiente: “No ha habido un compromiso real estatal de decirle a las IPS y EPS y esa es su responsabilidad: garantizar que todo el personal sanitario tenga la protección debida. Nosotros tenemos que estar protegidos, pero también tenemos que proteger a nuestras familias, garantizar que nuestras familias no se van a infectar por este virus”, agregó.

Le preocupa, además, que no haya anticipación a la llegada del virus y pidió hacer proyección a lo que pueda pasar en 15 o 20 días y no día a día, como si la solución fuera para hoy y no para el futuro.

Josman Monclou es médico intensivista y trabaja en una UCI en España. Aseguró que, a diferencia de lo que sucede en Colombia, los profesionales de la salud en ese país cuentan con la protección necesaria y no existen quejas al respecto. Al conocer la situación que se presenta aquí, agregó:  "Me preocupa lo que pueda pasar en Colombia en unas semanas".

También Alejandro Páez, médico y representante de los trabajadores sanitarios de Ese Hospital local (Cartagena), ciudad que reporta más de 30 casos en Colombia de coronavirus se sumó a la denuncia.

Relató en diálogo con Vicky en Semana que los médicos o enfermedad salen de las clínicas en Cartagena y los taxistas no les paran, y los conductores de otros servicios se transporte público los miran con desprecio y los agraden verbalmente. 

“Básicamente de las cosas que más se ha visto el personal sabe con sus uniformes o sale de la clínica y los taxistas no les paran en los buses los miran mal, les dicen irresponsables, el personal se siente discriminado”, afirmó y definió como “pésimas” las condiciones laborales de los profesionales de la salud que, según él, reciben sueldos “paupérrimos”. 

Se refirió a una doble moral en la sociedad colombiana que debe solucionarse: “en la noche nos aplauden y en la mañana nos miran como bichos raros, somos los escudos y víctimas”, añadió.

Otro caso de discriminación lo sufrió el terapeuta respiratorio Edward Vergara, quien ayuda a mitigar la emergencia en el hospital de Buga, en el Valle del Cauca. El profesional relató que tras terminar un turno de trabajo y al dirigirse hacia su domicilio, ubicado en el vecino municipio de Calima Darién, fue detenido por las autoridades y se le impidió llegar hasta su casa.

Vergara denunció que la orden de impedir la movilización de los trabajadores hospitalarios en Calima Darién fue emitida por Martín Alfonso Mejía Londoño, alcalde municipal, quien además es médico de profesión.

“Me dice que yo soy un factor de riesgo para el municipio y que no me va a dejar entrar al pueblo”, reveló.

Hasta la fecha, el doctor Vergara se hospeda cerca al hospital de Buga y no ha podido volver a Calima Darién a ver a su familia.