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Líderes conservadores se opusieron a decisión del partido.
Líderes conservadores se opusieron a decisión del partido. | Foto: SEMANA

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Continúan las críticas al partido por parte de los líderes conservadores por decisión de hacer parte de la bancada de gobierno

Figuras conservadoras hicieron el llamado de atención a la colectividad.

7 de septiembre de 2022

Juan Carlos Echeverry se fue lanza en ristre contra el Partido Conservador luego de que la colectividad se declarara partido de gobierno: “Una vergüenza que el Partido Conservador se declare de gobierno. Lo único que quiere ‘conservar’ es el acceso al presupuesto y las prebendas. Es el partido que conserva los ingresos mensuales de cien personas, en lugar de pensar en el futuro de 50 millones de colombianos”, dijo el excandidato presidencial.

La decisión ha sido cuestionada por varios exdirigentes conservadores que consideran que hubo acuerdos por debajo de la mesa para tomar esa posición. “No hubo un voto conservador que avalara la manguala de Petro y su extrema izquierda con las organizaciones criminales del narcotráfico. La corrupta alianza con Petro de los parlamentarios conservadores desprecia a la militancia del Partido e insulta sus principios”, cuestionó el expresidente Pastrana.

El excandidato presidencial Federico Gutiérrez lanzó una dura crítica en la que, a pesar de que no mencionó al Partido Conservador directamente, muchos la han interpretado como una pulla a la colectividad. “¿Qué tienen ideológicamente en común? Nada ¿Qué los une? La mermelada, la ambición personal, la corrupción y la sed de poder. ¡Vergonzoso!”, dijo el exalcalde de Medellín.

Por su parte, el excandidato Enrique Gómez también se mostró molesto con esa decisión. Criticó que el Partido Conservador, que supuestamente era la colectividad que mantenía los “valores y el baluarte” en Colombia, se “entregó” al Pacto Histórico y a Gustavo Petro. Gómez criticó a varios líderes de la colectividad con nombre propio.

“Nos dirán que es necesario para Colombia, para el futuro, que ellos sigan comiendo y sigan teniendo burocracia, abusando de las entidades que logren sacar en este nuevo pacto demoníaco con el Pacto Histórico, que vergüenza”, afirmó el líder de Salvación Nacional.

Dijo que es un partido que ya estaba en decadencia y que con esto se terminó de sepultar. Se refirió a lo sucedido hace cuatro años con Aida Merlano por el caso de compra de votos. “Muerto está ese partido”, aseguró.

En cambio, destacó que Salvación Nacional representa esos ideales conservadores, por lo que invitó a las bases a acercarse a su colectividad. “Invitamos a esa enorme base de conservadores a que abandonen ese cadáver del Partido Conservador y se unan en la defensa de la democracia y conservador con nosotros en Salvación Nacional”, dijo Gómez Martínez.

En las últimas horas, el excandidato presidencial del Partido Conservador, David Barguil, le había pedido a la colectividad no estar cerca del Gobierno, por las evidentes diferencias ideológicas y políticas.

“Invito a mi partido a que no sea inferior a lo que nuestra historia, nuestro presente y futuro esperan de nosotros. El Partido Conservador debe declararse en independencia y ser vocero de unas ideas que están en riesgo y que necesitan defensores comprometidos”, pidió Barguil a través de una carta.

Afirmó que la independencia podría garantizar el respaldo a las reformas que sean pertinentes para el país y oponerse a las que no lo sean. “No apostamos al fracaso del Gobierno ni queremos contribuir a eso, pero debemos defender nuestros ideales porque precisamente esa es la dinámica democrática y el equilibrio que debe existir en toda sociedad que se precie de ser libre”, dijo el exsenador.

A pesar de todos los reclamos y posiciones en contra, la bancada tomó la decisión de estar cerca del Gobierno. “Hoy luego de una amplia deliberación del Directorio Nacional y la Bancada Parlamentaria, determinó declararse partido de gobierno, preservando y salvaguardando los principios que fundamentan el espíritu conservador”, dijeron desde la colectividad.

Dicen que no abandonarán la defensa de las “líneas azules” como la propiedad privada, la libre empresa, la familia, el Estado social de Derecho, la fuerza pública, la libertad de expresión, entre otros valores que muchos hoy cuestionan y que se dejaron de lado.