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La deserción de varios congresistas de Cambio Radical para apoyar la reelección presidencial afecta la aspiración de Germán Vargas Lleras de ser Presidente.

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Nueve congresistas cambian radicalmente de bando

Ante la inminente aprobación del referendo reeleccionista, los congresistas desertaron de Cambio Radical y se pasaron a La U. Argumentan que su transfugismo no se debe a prebendas que les haya dado el gobierno.

31 de agosto de 2009

Los tránsfugas en los partidos políticos van en aumento. Uno de los damnificados esta semana por la deserción, fue Cambio Radical, quien perdió oficialmente nueve congresistas de los 35 que alcanzaron una curul en las elecciones de 2006, y se pasaron al Partido de La U. (Hay que recordar que ya había perdido otros dos hace unos meses: Roy Barreras y Oscar Gómez).

Se trata de los senadores Plinio Olano, Ramón Elías López y Claudia Rodríguez de Castellanos; y los representantes Ángel Custodio Cabrera, María Violeta Niño Morales, José Ignacio Bermúdez, Edgar Ulises Torres, Luis Felipe Barrios y Felipe Fabián Orozco.

Este lunes a las 10 de la mañana, cinco de los seis representantes estaban citados a un control de ética, pues durante el pasado debate del informe de conciliación del referendo reeleccionista ayudaron a levantar los impedimentos de los congresistas. Esta decisión destraba el trámite del referendo reeleccionista, lo que va contra la decisión mayoritaria del partido.

Entre los citados al control, también estaban los representantes Tarquino Pacheco, Juan Carlos Granados y Néstor Cotrina, aunque ellos, por ahora, permanecerán en la colectividad.

En un comunicado Cambio Radical había indicado que los militantes del partido “ingresan por voluntad propia, permanecen por compromiso con los ideales y directrices del partido y renuncian a la colectividad cuando consideran que no pueden cumplir con los estatutos o decisiones tomadas de manera democrática".

El mismo comunicado señaló que por voluntad de la mayoría de los congresistas, la colectividad decidió no votar el referendo reeleccionista y que “quienes no compartan las decisiones de las mayorías deberán someterse al control de ética del partido”.

Sin embargo, a través de otro comunicado los representantes (menos Torres) anunciaron este fin de semana su renuncia a la colectividad para pasar a integrar las filas del Partido de la U, entidad que promueve la reelección presidencial.

Luis Carlos Restrepo, presidente de la U confirmó que los cinco representantes y los tres senadores entraron a formar parte de la bancada del Partido de la U, “con la plenitud de derechos y deberes que dicha condición impone”.

En diálogo con La W, el representante Barrios dijo que el presidente del partido y candidato presidencial, Germán Vargas Lleras aprobó la decisión de los ocho congresistas. Dijo que Vargas Lleras estaba consciente de que esta decisión no se debe a que los congresistas hayan recibido ningún tipo de prebendas, sino a que siempre han expresado públicamente su decisión de apoyar una nueva reelección del Primer Mandatario.

Sin embargo, en las filas de la colectividad el hecho fue interpretado como una traición. El representante Carlos Fernando Motoa, quien hace parte de la bancada calificó la decisión de los congresistas como una “respuesta cobarde”, pues el partido iba a comenzar una investigación por faltar a la Ley de bancadas.

“El pecado es cobarde. Apenas les fue notificado el inicio de una investigación por parte del Comité de Ética, corrieron a refugiarse en otro partido para evadir su responsabilidad política con Cambio Radical”, dijo Motoa.

Según él, el proceso disciplinario “debía ser realizado porque cuando votaron el referendo y los impedimentos, eran parte del Partido y según la Ley, debían actuar de acuerdo a los lineamientos de la colectividad”, explicó el representante.

Con la renuncia de los congresistas Cambio Radical queda con 24 congresistas, pues ya los representantes Roy Barreras y Óscar Gómez habían sido expulsados de la colectividad. Sin embargo se prevé que puedan ser muchos más los desertores, pues la Reforma Política, recién aprobada lo permite por una vez.
 
Poco a poco se van quedando en la colectividad quienes respaldan la candidatura de Vargas Lleras y van saliendo quienes ven la oportunidad de ampararse en la sombra de Uribe.