Los especialistas recomiendan para cuidar las articulaciones hacer ejercicio regularmente y complementar los cuidados con el consumo de suplementos. | Foto: Archivo

SALUD

Colágeno contra la artrosis

Una de las formas de combatir la dolorosa enfermedad es el consumo de suplementos dietarios a base de colágeno, que permiten reducir el dolor y recuperar la movilidad.

1 de junio de 2015

La incapacidad por movilidad es uno de los males de salud pública más graves a nivel mundial, pues no solo provoca dolor físico y mental sino que le impide a quien la padece desplazarse, trabajar y, sobre todo, valerse por sí mismo. Las enfermedades reumáticas son las principales causantes de estas dolencias y la más recurrente de ellas es la artrosis u osteoartritis.

La artrosis se produce por el desgaste de los cartílagos y afecta a personas de cualquier edad, pero sobre todo a los adultos mayores. Se estima que el 50 por ciento de quienes la padecen son mayores de 60 años y el 80 por ciento están entre los 75 y 80 años. En Colombia, la padecen alrededor de 3 millones de personas, y en América Latina la prevalencia de la enfermedad es del 7,3 por ciento.

Una de las modalidades de tratamiento más novedosas de los últimos tiempos en el área de la reumatología y la traumatología es el consumo de suplementos a base de colágeno, que le permiten al organismo absorber los nutrientes necesarios para que los condorcitos, o las células de los cartílagos y las articulaciones, estén saludables.

El colágeno es una de las proteínas más abundantes del cuerpo y resulta esencial para mantener saludables las articulaciones, pues les permite mantener su fortaleza y elasticidad. Además, ayuda a restaurar los huesos, la piel y los tejidos articulares. Los cartílagos son los tejidos que ejercen la labor de amortiguar y proteger los extremos de los huesos para que las articulaciones se muevan adecuadamente. Estos se encuentran en su mayoría en las rodillas, las caderas, los hombros, los codos y la columna vertebral.  

Varios expertos aseguran que existen más de ocho tipos de colágeno diferentes en los tejidos corporales, y están distribuidos en distintas cantidades. Todos ellos trabajan por hacer más eficientes los procesos anatómicos del ser humano. El colágeno tipo II ayuda a fortalecer la resistencia y la elasticidad del cartílago.

Las personas tienen la capacidad de generar su propio colágeno naturalmente, pero su producción disminuye por factores como la edad, el sobrepeso y los malos hábitos. Por eso los especialistas recomiendan para cuidar las articulaciones consumir alimentos que ayuden a tener una nutrición balanceada, hacer ejercicio regularmente y complementar los cuidados con el consumo de suplementos nutricionales hechos a base de colágeno hidrolizado.

Hay varios suplementos para tratar la artrosis en el mercado, entre ellos el Gelicart, un producto alemán hecho a base de péptidos de colágeno bioactivos que tiene como respaldo 14 estudios científicos realizados con más de 2.500 pacientes y ha sido recomendado por especialistas de todo el mundo.

“Este producto está compuesto de péptidos de colágeno bioactivos, una sustancia que puede tomar cualquier persona sin importar qué otros medicamentos esté consumiendo. Es algo natural y tiene un efecto benéfico sobre el cartílago de la articulación”, afirma el traumatólogo y ortopedista colombiano César Arango, que ha visto cómo varios de sus pacientes han respondido positivamente al Gelicart.

“El tratamiento de esta enfermedad es muy costoso no solo para el paciente sino para el sistema de salud público, sobre todo cuando está muy avanzada. De tal manera que evitar una cirugía es una ganancia muy grande”, añade Arango.

Según el último Estudio Nacional del Dolor que presentó la Asociación Colombiana para el Estudio del Dolor (ACED), el 64.5 por ciento de la población en Colombia tiene algún tipo de dolor osteomuscular. Además, se estima que para 2050 por lo menos 700 millones de personas vayan a padecer artrosis.

Los expertos recomiendan un tratamiento multimodal, es decir, que cada paciente sea tratado según su cuadro clínico con terapias para fortalecer la masa ósea y muscular, pero también con analgésicos, infiltraciones o suplementos dietarios. De esa manera el médico podrá controlar los factores de riesgo y, sobre todo, la calidad de vida mejorará sustancialmente, pues la movilidad es fundamental para el bienestar de cualquier persona.