Cinco señales que anuncian que puede sufrir un infarto
Cinco señales que anuncian que puede sufrir un infartoo particular. | Foto: Archivo particular

SALUD

El mal genio aumenta el riesgo de infartos y ‘derrames’

Aquellos con historial de enfermedades del corazón tienen más probabilidades de presentar estos eventos cuando tienen rabietas, afirma estudio.

5 de marzo de 2014

Durante las dos horas que siguen a un enfado, las probabilidades de sufrir un ataque al corazón se multiplican por cinco, mientras que las de sufrir un 'derrame' cerebral se triplica, concluyó la facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard.

Luego de analizar los datos de miles de pacientes, los investigadores reportaron que este fenómeno es acumulativo: cuanto más frecuentemente alguien se enfade, mayor es el riesgo.

Los autores le dijeron a la revista European Heart Journal que aquellos con factores de riesgo preexistentes -historia de enfermedades cardiovasculares- son particularmente susceptibles.

La doctora Elizabeth Mostofsky, quien participó en el estudio, dijo: "A pesar de que el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares agudos con un solo ataque de ira es relativamente bajo, el riesgo se puede acumular en las personas con episodios (de ira) frecuentes".

En la población sin problemas cardiovasculares, el riesgo de que se presente un infarto es bajo, pero esta cifra asciende en aquellos que tienen antecedentes de sufrir enfermedades cardiovasculares o tienen factores que los predisponen a ellas.

Mostofsky y sus colegas también calculan que el riesgo es acumulativo. Es decir, que los individuos de mal temperamento tienen más probabilidades de padecer eventos coronarios. Cinco episodios de ira al día se traducirían en cerca de 158 ataques cardíacos adicionales por cada 10.000 habitantes al año en personas con con un riesgo cardiovascular bajo.

No está claro por qué la ira puede ser particularmente peligrosa para las arterias. Los investigadores señalan que sus resultados no indican 
necesariamente que las rabietas sean la causa de los problemas cardíacos y circulatorios.

Sin embargo, saben bien que el estrés crónico puede contribuir al desarrollo de enfermedades cardíacas, en parte, debido a que se librean sustancias que aumentan la presión arterial. Además, quienes sufren de estrés pueden desarrollar hábitos poco saludables para lidiar con él, como fumar o beber.

El estudio señala que se necesita más evidencia para entender este vínculo y averiguar si las terapias antiestrés pueden evitar dichas complicaciones. 

Doireann Maddock, jefe de enfermería de la Fundación Británica del Corazón, dijo que "la causa no está clara, pero podría relacionarse con los cambios fisiológicos que la ira provoca en nuestros cuerpos. Se necesita más investigación para explorar los mecanismos biológicos".

"La forma de lidiar con la ira y el estrés es muy importante. Aprender a relajarse puede ayudar a manejar las situaciones de alta tensión. Muchas personas encuentran que la actividad física ayuda a desahogarse después de un día estresante", e indicó: "Si usted cree que tiene niveles peligrosos de estrés o enojo frecuentes, hable con su médico de cabecera".

Con BBC.