El superalimento que reduce los niveles de azúcar y evita los picos de glucosa

La alimentación saludable es la piedra angular de una vida sana. La ingesta de una dieta balanceada, junto con la práctica regular de ejercicio, es la fórmula clave para evitar el desarrollo de enfermedades, especialmente aquellas llamadas crónicas como la diabetes o la hipertensión.

La diabetes se genera cuando los niveles de azúcar en la sangre son muy elevados y es posible que con el tiempo esto lleve a que se presenten daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios, asegura la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

El azúcar, también conocido como glucosa, puede incrementarse debido a varias razones. Una, porque el cuerpo no produce suficiente insulina; y dos, porque no la utiliza bien.

La insulina es una hormona que se encarga de regular los valores adecuados de esta sustancia en la sangre. Permite que entre en el organismo y sea transportada al interior de las células, en donde se transforma en energía facilitando el funcionamiento de los músculos y tejidos.

Cuando esto no ocurre, el azúcar se queda en la sangre ocasionando las dificultades de salud anteriormente mencionadas, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales forma de los Estados Unidos.

La alimentación, junto con el ejercicio, es la mejor forma de controlar los niveles de azúcar en la sangre y hay productos en particular que deberían vincularse a la dieta diaria para ayudar a mejorar la condición.

Uno de ellos es la avena, que es reconocida por ser rica en nutrientes esenciales y beneficiosos para el organismo.

Avena para prevenir la diabetes

Una de esas bondades es precisamente el control de la glucosa. La avena es fuente de carbohidratos complejos o de absorción lenta, por lo que ayuda a evitar picos de glucosa en la sangre, además de aportar energía al organismo.

De igual forma, su alto contenido en fibra disminuye la cantidad de insulina que el páncreas libera en el torrente sanguíneo.

Esto implica que los alimentos que las personas ingieren se absorben de manera más lenta sin segregar mucha insulina en periodos cortos.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos indican que debido a que la fibra no se digiere ni se absorbe, no provoca un aumento repentino de azúcar en la sangre, lo que si ocurre con otros nutrientes.

Una publicación de la revista Mejor con Salud, escrita por Yamila Papa Pintor, señala que hay evidencia científica que apunta a que la ingesta de avena afecta de forma positiva los niveles de glucosa y lípidos en la sangre en pacientes con diabetes tipo 2.

“Los betaglucanos (un tipo de fibra presente en este y otros cereales) son los responsables de esta acción. Asimismo, parece ser que los efectos positivos aumentan cuando se toman dosis pequeñas a largo plazo”, precisa.

Otra de las bondades de la avena relacionadas con el azúcar es que al contener vitaminas del grupo B, ayuda a aprovechar mejor la glucosa y a tonificar el sistema nervioso.

Más beneficios

La fibra de este cereal contribuye al movimiento del bolo fecal a través del intestino. Además, aumenta el volumen de las heces.

Por ambos motivos, es un alimento de ayuda para mejorar el proceso digestivo y prevenir el estreñimiento.

De igual forma, la avena ayuda a cuidar la salud del corazón. Según la Asociación Americana del Corazón, este alimento contribuye para controlar el peso corporal y reducir los niveles de colesterol, dos factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardíacas.

Este alimento también ayuda a cuidar la flora intestinal. Su fibra soluble llamada betaglucano, es fermentable. Eso hace que tenga un efecto prebiótico en el intestino, es decir, que alimente las bacterias beneficiosas que componen la microbiota y favorezca su crecimiento, viabilidad y permanencia en los intestinos, precisa el portal Cuerpo Mente.

De igual forma, se dice que previene la aparición de enfermedades como el asma. Según un estudio publicado en el British Journal of Nutrition, la introducción temprana de la avena en la dieta de los niños reduce el riesgo de que desarrollen asma de tipo persistente, indica la citada fuente.