sexualidad

El y/o ella

Un reciente estudio revela que los hombres que se sienten bisexuales no tienen una respuesta física que demuestre que en realidad lo son. ¿Existe la bisexualidad masculina?

17 de julio de 2005

Aunque no es del todo raro encontrar hombres que se definen a sí mismos como bisexuales, éstos parecen ser el patito feo de la comunidad gay. Muchos homosexuales tienden a pensar que el bisexual es alguien que todavía sufre una crisis de identidad y que no se ha decidido todavía por ser homosexual. Los heterosexuales, por su parte, se inclinan por creer que los bisexuales son otra variante de los gay. Una nueva investigación parece indicar que no existe una respuesta genital realmente bisexual. O, al menos, que los comportamientos bisexuales son más complejos de lo que gay y heterosexuales creen.

El estudio, realizado por la Northwestern University y el Centro para la Adicción y la Salud Mental, en Toronto (Canadá), fue publicado en el último número de la revista Psychological Science e incluyó a 30 hombres heterosexuales, 38 homosexuales y 33 que se declaraban bisexuales. A cada uno de ellos se le mostraron varios videos. Al principio se trataba de escenas relajantes y neutrales de paisajes naturales. Luego les mostraban cortos videos sexuales de dos minutos de duración (que podían ser de hombres, de mujeres, o bien de hombres y mujeres teniendo relaciones), seguidos nuevamente de los videos neutrales. El ciclo se repetía varias veces mientras a los participantes se les medía el nivel de excitación en dos niveles: el sicológico, por medio de reportes de qué tan estimulantes les parecían los videos; y el físico, gracias a un pequeño dispositivo elástico alrededor del pene que refleja los cambios durante la erección.

El resultado: "Los hombres que reportaron una orientación bisexual no mostraron ninguna evidencia de excitación genital específicamente bisexual", según el estudio. En otras palabras, una cosa es lo que dicen de sí mismos (que son bisexuales), y otra, muy distinta, la manera como su cuerpo reacciona. Tres cuartas partes de los declarados bisexuales reaccionaron con el mismo patrón que los homosexuales. La cuarta parte restante se comportó como los heterosexuales.

¿Son entonces los bisexuales, como muchos creen, simplemente homosexuales que se encuentran en un proceso de reconocer su verdadera identidad sexual?

No parece ser ese el caso de Miguel, un comunicador de 29 años, que sabía desde pequeño que sentía afinidad tanto con los niños como con las niñas. "Yo soy un ser humano con las características físicas y mentales de un hombre. No me siento mujer, ni gay, y tampoco me etiquetaría como heterosexual. Pero no tengo problema en tener algún tipo de relación, sexual o afectiva, con otro hombre", sostiene.

En efecto, cuando Miguel entró a la universidad, dejó a un lado las represiones sexuales de sus años de colegio. En una fiesta conoció a un hombre con quien tuvo una fuerte conexión. Empezaron a verse los fines de semana para ir a trotar, o a jugar tenis, o a cualquier otra cosa. La excusa no importaba. Cada vez buscaban más momentos para estar juntos, hasta cuando una noche, al calor de los tragos, pasó lo que tenía que pasar. "Tuvimos relaciones y empezamos algo que básicamente era un noviazgo. Estuvimos juntos por tres años y fue una unión muy estable". Después de esta relación, Miguel volvió con una mujer, con quien duró un año más. "Fue un noviazgo normal, aunque nunca le conté que también me gustaban los hombres". Desde hace un año Miguel está soltero y sostiene relaciones casuales tanto con hombres como con mujeres.

"Yo sí creo que existe la bisexualidad en los hombres. Y no sólo eso, sino que es una orientación sexual frecuente", afirma el sexólogo Manuel Velandia. En efecto, el estudio no niega que, en términos de comportamiento e identidad, la bisexualidad sea una realidad. Pero sí plantea serias cuestiones: ¿cómo explicar que quienes se sienten bisexuales no tengan respuestas físicas que correspondan a su orientación? ¿Cómo entender entonces la bisexualidad masculina?

"El estudio no significa que ellos no son bisexuales. Significa que la orientación sexual es una construcción sicológica multifacética y compleja. La excitación sexual es sólo una parte de esa construcción", le dijo a SEMANA Meredith Chivers, una de las autoras de la investigación canadiense.

Muchos estudiosos de la sexualidad humana han debatido desde el siglo XIX el papel de la bisexualidad en el desarrollo de la identidad sexual. Sigmund Freud decía que los humanos son bisexuales por naturaleza. A mediados del siglo pasado, el sexólogo Alfred Kinsey encontró, en uno de sus grandes estudios sobre la sexualidad humana, que una gran cantidad de hombres casados no tenían problema en aceptar que tenían relaciones con otros hombres. El mismo estudio canadiense mostró que la mayoría de los hombres se excitaba más con las imágenes del sexo, que en principio no los atraía, que con las imágenes neutrales de paisajes. Esto, según los científicos, sugiere que la mayoría de los hombres tienen cierta capacidad de excitación bisexual. En palabras de Miguel, "lo anormal es ser solamente homosexual o solamente heterosexual. En el fondo, yo creo que todos somos bisexuales".

Lo cierto es que ser heterosexual, homosexual o bisexual es algo que depende mucho de la genética, pero también de la cultura y de las relaciones que las personas establecen a lo largo de su vida. El problema, según Velandia, es que las personas piensan que la identidad es algo fijo y que implica polos opuestos. "Lo que se ha demostrado en los últimos trabajos -afirma el sexólogo- es que la identidad sexual no es estática, sino móvil. Es decirse, que pueden presentar situaciones que modifican esa identidad".