Esta es la forma correcta en la que debe comer para perder peso

Adelgazar y perder peso es, sin lugar a dudas, uno de los objetivos más comunes que se trazan las personas día tras días. Sin embargo, ya sea por recomendación médica o para verse y sentirse mejor, esta meta no es fácil de lograr y requiere de cambios drásticos y compromisos para llegar al punto deseado.

Con el fin de cumplir con lo planeado, las redes sociales se han convertido en un espacio que sirve de guía en al algunos casos, pues diferentes profesionales comparten sus rutinas de ejercicio, consejos sobre dietas y hasta procedimientos estéticos. Así mismo, hay personas que se atreven a compartir sus casos de éxito y entregan algunos tips que ayudaron con su objetivo.

Pese a esto, en los millones de videos que se conocen hay muy pocos que explican algo tan básico como la forma de masticar y su importancia para bajar de peso, lo que muchas personas no tienen en cuenta a la hora de poner en marcha cualquier dieta.

Según los expertos, masticar es crucial para acelerar la digestión, al igual que todos los procesos que se llevan a cabo en la boca cuando se ingiere cualquier tipo de alimentos.

En este proceso, la salivación también es crucial, ya que aparte de humedecer el alimento, también aporta ciertas sustancias químicas que ayudan a ablandarlos y a ‘limpiarlo’ de las posibles bacterias que puedan traer.

Según el British Medical Journal, la masticación está ligada directamente con la pérdida de peso, al igual que comer despacio, evitar las tentaciones entre comidas y no comer después de irse a dormir.

Un estudio practicado a 60.000 japoneses que sufren de diabetes y que los sometió a controles durante cinco años, determinó que las personas que se mostraron más saludables al cabo del análisis, fueron las que manifestaron haber comido más despacio que otras.

A la hora de calcular la obesidad entre los participantes, se logró establecer que esta se reducía hasta en un 42 % en las personas que comían más despacio, frente al 29 % que se presentó en las personas que comían a una velocidad considerada como normal.

Sumado a esto, aparecen otras variables como la termogénesis, las cuales son puestas a discusión por los profesores de la universidad de Waseda, en Japón. Según ellos, el gasto calórico que se realiza a la hora de comer y la facilidad del organismo para realizar sus labores metabólicas, contribuyen a que la digestión sea mucho mejor y por ende, a que se adelgace con mucha mayor eficacia.

Son dos pasos a tener en cuenta: comer despacio y masticar bien. El estudio encontró que las personas que disponen del tiempo suficiente para comer sin afanes y mastican muy bien los alimentos hasta volverlos papilla para ingerirlos pueden prevenir la obesidad y, por ende, un aumento de peso no deseado.

“Se dice que el proceso de masticación mejora el gasto energético asociado al metabolismo de los alimentos y aumenta la motilidad intestinal, lo que se traduce en un aumento de la generación de calor en el cuerpo tras la ingesta de alimentos, conocido como termogénesis inducida por la dieta (TID). Pero hasta ahora no estaba claro cómo la masticación prolongada induce la TID en el cuerpo”, anota Europa Press.

Explica que la TID tienen la capacidad de aumentar el gasto energético por encima del nivel de ayuno basal, lo cual puede prevenir el aumento de peso. Los investigadores encontraron que el hecho de comer lento y masticar bien no solo aumenta la TID sino también ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la región esplácnica del abdomen. El estudio añade que si bien la TID inducida por masticación se vincula con una mejor digestión y absorción en el abdomen, todavía falta exploración en la materia para entender otros puntos que serían cruciales en la materia.