Este superalimento prolonga la vida y reduce el colesterol malo

Comer frutos secos como parte de una alimentación balanceada resulta muy favorable para la salud. Contienen ácidos grasos insaturados y otros nutrientes, que son saludables para el organismo, precisa el instituto de investigación Mayo Clinic.

Los análisis científicos han demostrado que comer frutos secos de manera frecuente disminuye los niveles de inflamación relacionada con la enfermedad cardíaca y la diabetes y seguir una dieta saludable regular que los incluya puede ayudar a:

• Mejorar la salud de las arterias
• Disminuir la inflamación relacionada con enfermedades cardíacas
• Disminuir el riesgo de coágulos sanguíneos, que pueden causar ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares

• Disminuir el riesgo de tener presión arterial alta
• Bajar el riesgo de muerte prematura debido a una enfermedad cardíaca
• Reducir los niveles del colesterol no saludable, en particular el colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL, por sus siglas en inglés, o “malo”) y los triglicéridos, que pueden bloquear las arterias.

Uno de estos productos que no debería faltar en una dieta son las nueces. Este alimento es rico en omega-3, fibras y polifenoles, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, precisa el portal de bienestar y salud Tua Sáude.

Adicionalmente, aunque se trata de un alimento fuente de calorías, ayuda a disminuir el peso corporal, gracias a que contiene fibras y proteínas que aumentan la sensación de saciedad y el gasto energético, además de nivelar el azúcar en la sangre, siendo un alimento útil para ayudar a controlar la diabetes.

Cuidan el corazón y el cerebro

Las nueces son beneficiosas para la salud cardiovascular pero, además, estimulan la actividad del cerebro. Sus nutrientes, ricos en antioxidantes y antiinflamatorios, ayudarían a prevenir el deterioro cognitivo, reduciendo el daño oxidativo y la inflamación en el cerebro.

Una investigación de la Universidad de Harvard concluye que el consumo frecuente de nueces está relacionado con una mejora de las funciones cognitivas en edades avanzadas, según cita una publicación del medio digital Business Insider, el cual también reseña otro estudio realizado por Rush University Medical Center de Chicago, en el que se determina que la vitamina E que contienen estos frutos secos ayuda en la prevención de la enfermedad de Alzheimer.

Esta vitamina también interviene en el bienestar de la piel, ayudando a restaurar la humedad, reducir las líneas de expresión y proteger a la dermis de los daños causados por factores como la contaminación o rayos del sol.

Este nutriente protege de la acción de los radicales libres, jugando un rol importante frente al envejecimiento. El cuerpo también lo requiere para ayudar a mantener el sistema inmunitario fuerte y poder sintetizar la vitamina K.

Por otro lado, al ser ricas en fibras, polifenoles y ácidos grasos, las nueces actúan como alimento prebiótico, ya que estimula el crecimiento de bacterias beneficiosas para la salud intestinal, ayudando a regular la función de los intestinos, previniendo el estreñimiento, además de mejorar el sistema inmunitario y disminuir el riesgo de contraer cáncer de colon, asegura Tua Saúde.

Dadas sus bondades y los aportes saludables que le brindan al organismo, se dice que las nueces ayudan a prolongar la vida, pues en el marco de una dieta saludable ayudan a prevenir enfermedades crónicas que afectan a millones de personas en el mundo.

Cuidar las porciones

Si bien es un producto que le brinda muchos beneficios al organismo, es importante tener claro de debido a su alto contenido de grasa no se deben consumir en cantidades excesivas. Si bien la mayor parte se trata de grasa saludable, las calorías suman, asegura Mayo Clinic.

De acuerdo con las recomendaciones de esta institución, los adultos deben procurar comer aproximadamente de cuatro a seis porciones de nueces o frutos secos sin sal por semana como parte de una alimentación saludable. En el caso de los niños, la cantidad varía según la edad y por ello es aconsejable que el pediatra determine la porción que deben ingerir.

También es importante consumir las nueces tostadas en seco, en lugar de cocidas en aceite. Una porción es un puñado pequeño (1,5 onzas o 43 gramos).