Frutos secos
Consumir frutos secos se ha considerado como una de las alternativas para ayudar a bajar de peso, uno de los objetivos de millones de personas en el mundo. | Foto: Getty Images

Vida Moderna

La mejor forma de consumir frutos secos para no subir de peso

Los especialistas han señalado que al igual que todas las grasas saludables, estos productos tienen un gran poder saciante, que ayuda a controlar mejor el apetito entre comidas.

20 de mayo de 2023

Consumir frutos secos se ha considerado como una de las alternativas para ayudar a bajar de peso, uno de los objetivos de millones de personas en el mundo.

Los especialistas han señalado que al igual que todas las grasas saludables, estos productos tienen un gran poder saciante, que ayudan a controlar mejor el apetito entre comidas.

Además, debido a sus propiedades como ácidos grasos insaturados y otros nutrientes, resultan muy favorable para el corazón.

Pese a esos beneficios, han advertido que algunos frutos secos pueden tener un alto contenido de calorías, por lo que la recomendación es limitar las porciones.

De acuerdo con la Fundación Española del Corazón, estos productos se caracterizan “por ser ricos en proteínas (10-30 %) y grasas (30-60 %), especialmente ácidos grasos mono y poliinsaturados”.

Señaló que, en especial, “las nueces, ya que contienen ácidos grasos omega 3, precursores de DHA y EPA. También, presentan minerales de fácil absorción, como potasio, calcio, fósforo, hierro y magnesio; así como fibra insoluble, ácido fólico, vitaminas E y B1″.

Los frutos secos, grupo al que pertenecen las nueces,  son ricos en calcio, un mineral clave para fortalecer los huesos, favorecer el crecimiento y prevenir el desarrollo de enfermedades como la osteoporosis
De acuerdo con la Fundación Española del Corazón, estos productos se caracterizan “por ser ricos en proteínas (10-30 %) y grasas (30-60 %), especialmente ácidos grasos mono y poliinsaturados”. | Foto: Getty Images / Westend61

Entre tanto, la dietista-nutricionista Laura Jorge aseguró a La sexta que “nos aportan gran saciedad pero como todos los alimentos, aunque sean buenos y de calidad, es importante tomarlos en su justa medida, porque si queremos perder grasa, debemos generar sí o sí un déficit calórico”.

En este caso, recomendó tomar entre 25 y 30 gramos por ración, de 3 a 7 días por semana, aunque señaló que se pueden consumir todos los días y en cualquier momento del día, ya sea al desayuno, como aderezo en las ensaladas, con un yogur en la merienda o incluso en tostadas.

“La cantidad dependerá de la persona y del conjunto de su alimentación, pero por norma general, podemos tomar entre a diario, entre 15 y 30 gramos”, destacó.

Explicó que la cantidad recomendada equivale, más o menos a un “puñadito” o lo que cabe en la mano.

La nutricionista señaló que cuando una persona tiene como objetivo bajar de peso, se deben seguir esos consejos aunque estimó que “habría que individualizar cada caso, por ejemplo, ver cuál es la cantidad y la variedad de esa dieta o ver si va a tomar o no al día más grasas saludables”.

Para perder peso es importante hacer ejercicio.
Los frutos secos aportan gran saciedad pero como todos los alimentos, aunque sean buenos y de calidad, es importante tomarlos en su justa medida. | Foto: Getty Images

¿Se pueden consumir de noche?

Si bien ganar peso depende del balance energético, es decir, de la cantidad total de calorías consumidas en relación con la cantidad de calorías quemadas durante todo el día, en caso de cenar muy tarde aumentan las posibilidades de ganar peso.

Eso significa que cuando una persona consume alimentos en exceso en la noche, especialmente, justo antes de dormir, el cuerpo acumulan esas calorías adiciones como grasa.

Según los expertos, eso ocurre con cualquier tipo de alimento, por lo que, se aconseja consumir una comida ligera, al menos dos horas antes de acostarse, de manera que el cuerpo tenga tiempo para digerir los alimentos.

Vitaminas ayudan a potenciar la salud del cerebro.
Otro de los beneficios es un mejoramiento de la salud del cerebro, por la presencia de nutrientes como vitamina E y el ácido fólico, por lo que también ayuda a prevenir enfermedades neurodegenerativas. | Foto: Getty Images / Mohammed Haneefa Nizamudeen

Otros aportes

Como mencionamos anteriormente, entre los de los beneficios se encuentran la salud del corazón y reducción de peso, pero también ayudan a controlar el azúcar en sangre, debido a que contienen nutrientes que pueden ayudar a reducir los niveles de glucosa en la sangre y mejorar la sensibilidad a la insulina.

Así mismo, fortalecen el sistema inmunológico por sus propiedades antioxidantes y otros nutrientes, que además contribuyen a prevenir enfermedades y mejoran la salud ósea, por su contenido de minerales como el calcio, el magnesio y el fósforo.

Otro de los beneficios es un mejoramiento de la salud del cerebro, por la presencia de nutrientes como vitamina E y el ácido fólico, por lo que también ayuda a prevenir enfermedades neurodegenerativas.

Contribuyen, además, a reducir el estrés y la ansiedad y mejoran el estado de ánimo. Por la presencia de vitamina E y el zinc, ayudan a mantener la piel saludable y prevenir el envejecimiento prematuro.

Finalmente, por la presencia de antioxidantes, protegen el cuerpo de daños celulares y a prevenir enfermedades crónicas.