Los inventos del año

Las gafas inteligentes

Google puede jactarse de ser la creadora de herramientas indispensables para la vida moderna. Su metabuscador es usado por millones de personas cada minuto para resolver cualquier duda. Como si fuera poco, este año creó uno de los dispositivos futuristas más increíbles. Se trata de Google Glass, unas gafas inteligentes que le permiten al usuario conectarse a los datos que necesite o al internet sin necesidad de tener una pantalla de computador o celular frente a sus ojos. Y sin utilizar ningún tipo de teclado. Se maneja por medio de movimientos de la cabeza y en el marco de las gafas tiene cámara integrada, micrófono, altavoz, conexión a internet y una pequeña pantalla encima de la línea de visión del ojo derecho. Allí se proyectan desde imágenes hasta correos electrónicos. Las Google Glass estarán en el mercado en 2014 y se venderán en 1.500 dólares.

Impresiones 3D en casa

En 2011 algunas de las publicaciones más prestigiosas del mundo anunciaron el desarrollo de la impresión en tres dimensiones, una tecnología que los expertos consideran la nueva revolución industrial debido a que se pueden diseñar en un computador e imprimir en esta máquina especial desde un avión hasta un violín que funcionará perfectamente. Sin embargo, hasta ahora era algo del interés de ingenieros y arquitectos, y las impresoras eran muy grandes e inaccesibles para el público general. Este año salió al mercado la MakerBot

Replicator 2, una impresora de escritorio que puede ser usada por cualquiera en casa y cuesta alrededor de 4 millones de pesos. "Hemos puesto la fábrica en una caja del tamaño de un microondas al alcance de cualquier individuo", señaló Bru Pettis, director de MakerBot Industries, empresa productora de impresoras 3D en Nueva York. La máquina, además de ser rápida, contiene un software de fácil manejo.

El neumático inteligente

La marca Goodyear desarrolló este año un tipo de llanta que no necesita revisiones de aire, pues mantiene la presión de la rueda gracias a un regulador interno que logra identificar el momento en que necesitan inflarse de nuevo. El regulador se activa por el propio peso del vehículo y, de manera automática, permite la entrada del aire exterior hacia la válvula de inflado. Y una vez ha llegado al nivel óptimo se cierra. ?

Test casero del VIH

Al año mueren en el mundo aproximadamente 30 millones de personas a causa del sida y esa cifra tan alta se debe en parte a que muchos no se diagnostican a tiempo. En julio, la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó un examen casero que puede ayudar al diagnóstico temprano. Se trata el OraQuick, un kit de uso doméstico que sirve para detectar si una persona es seropositiva sin necesidad de ir a un laboratorio clínico. La prueba detecta la presencia del virus del VIH con una muestra de saliva y arroja el resultado entre 20 y 40 minutos después. Este novedoso examen cuesta menos de 60 dólares y está autorizado exclusivamente para personas mayores de 17 años.

Haga su propia nube

Aunque parece un fotomontaje hecho en Photoshop, la nube que se ve en la habitación fue creada por Berndnaut Smilde. El artista danés se las ingenió para producir nubes perfectas y a escala en un cuarto. Para lograr esto tuvo que adecuar el lugar con la temperatura, humedad y luz necesarias, y posteriormente aplicar un pequeño toque de humo, como el que se utiliza en las fiestas. De esa forma, queda ante los ojos una nube tal y como se ve en el cielo, pero esta vez en el interior de una casa.

La bola del superagente 86

La tecnología siempre está a la vanguardia en temas de espionaje y en el ámbito militar, y el 2012 no fue la excepción. Este año un estudiante del Massachussets Institute of Technology (MIT) y un Range Rover del ejército de Estados Unidos se juntaron para crear un artefacto redondo al que no se le escapa nada. Se trata de una bola del tamaño de una pelota de béisbol que cuenta con seis cámaras que le permiten tener una visión de 360 grados y está diseñada para entrar a lugares donde una persona no podría llegar. Por ejemplo, en caso dado que un edificio se esté incendiando, los policías y bomberos podrían tener una visión total de lo que sucede gracias a este aparato que, además de tomar fotografías y grabar en video, está equipado con sensores para detectar cualquier amenaza. Toda esta información la recibe el usuario a través de un smartphone de forma inmediata.

El brazo biónico

Nigel Ackland, un hombre de 53 años que perdió el antebrazo en un accidente industrial, se siente como Terminator. Y no es para menos, pues desde hace unos meses y tras haberse sometido a varias cirugías e implantes fallidos, tiene un brazo biónico muy similar al del personaje encarnado por Arnold Schwarzenegger. Se trata de Bebionic, una prótesis avanzada que le permite a personas que han perdido alguno de sus brazos volver a moverlo de forma precisa y ágil. A diferencia de otras versiones preliminares de esta prótesis, la que usa Ackland le permite conducir, teclear, pelar frutas, preparar huevos, ir de compras y lavarse las manos. Bebionic 3 es la mano biónica más avanzada del mundo y cuesta 30.000 dólares.

Taladro inalámbrico

Cuando una persona juega Nintendo Wii puede controlar los movimientos de la consola con solo mover sus manos. Ahora es posible utilizar un taladro de esa misma forma. La marca Black & Decker lanzó este año el modelo 4v MAX que gracias a un giroscopio interno es sensible al movimiento de la muñeca y le permite funcionar sin necesidad de oprimir una sola tecla. Además de ser inalámbrico, el aparato tiene una velocidad asombrosa y cuesta apenas 40 dólares.

La zapatilla perfecta

Las marcas deportivas siempre compiten por ofrecer nuevas y mejores tecnologías, especialmente en los años en que se celebran los Juegos Olímpicos. En 2012 las justas se llevaron a cabo en Londres y el producto que más llamó la atención fue la Nike Flyknit Racer, una zapatilla que está hecha o bordada en una sola capa, a diferencia de las demás que están unidas por diferentes costuras. Esto hace que sea tan liviana que quienes la han usado, como el maratonista Abdi Abdirahman, señalan que deben mirar sus pies para darse cuenta que tienen calzado. Cuesta 150 dólares.