Notas de vida moderna de la semana

Cómo evitar caer en la hoguera pública

Tras el desafortunado video de los hinchas colombianos en Rusia, queda claro que muchos aún no entienden el impacto de las redes sociales. Publicar hoy contenidos en la red es un arma de doble filo porque la amplificación del mensaje es enorme. La cultura de la sanción social siempre ha existido. “Antes apedreaban a la gente, hoy lo hacen con insultos en las redes sociales”, dice Víctor Solano, consultor en reputación digital de Kreab Colombia. El especialista señala cuatro puntos para tener en cuenta antes de compartir videos, trinos, comentarios, u otra información en internet.

Ni siquiera lo produzca: aunque resulta obvio, lo mejor es no producir algo que no quiera que se sepa o se publique en redes sociales. Incluso los archivos guardados en el computador o en el celular por errores humanos pueden terminar en internet.

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Las redes amplifican el mensaje: en el año 1700 la probabilidad de que un mensaje alcanzara a 5.000 personas podría tardar años, mientras que hoy eso sucede en cuestión de minutos. El alcance de un video viralizado puede ser incluso mayor que el de un medio de comunicación. Pregúntese antes si publicaría ese mensaje en la primera página de un periódico.

Si decidió conscientemente: recuerde que se juega su reputación. “Hacemos una puesta en escena de lo que queremos publicar”.

Sea coherente: la mejor manera de tener una buena reputación digital es ser consecuente con lo que hace, lo que piensa, lo que siente y lo que dice. En tiempos del Gran Hermano, donde hay cámaras que vigilan cada paso, la línea entre lo público y lo privado es muy delgada.

Medicinas depresivas

Un estudio publicado en la revista JAMA encontró que al menos un tercio de los medicamentos más prescritos en pacientes de Estados Unidos pueden causar depresión como efecto secundario. Aún más, muchos de los pacientes toman más de una de esas drogas, lo que hace que cada medicamento adicional aumente la probabilidad. La lista incluye medicinas para tratar el reflujo, la presión arterial, anticonceptivas, y algunos anticonvulsionantes y corticoides.

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En el caso de los betabloqueadores y el interferón, los efectos son conocidos, pero los investigadores admitieron que para ellos había sido una sorpresa encontrar tantos medicamentos comunes en la lista. Hay que aclarar que el estudio encontró una asociación y no una relación directa de causa y efecto, pero señala el riesgo que todos los medicamentos tienen y la importancia de reportar los efectos secundarios.

Google predice la muerte

^{Foto: Istock}

Un algoritmo desarrollado por Google, que examina una variedad de datos de la historia médica de los pacientes, podría predecir con más certeza que un experto la hora de la muerte de un paciente. Así lo hizo con una mujer con cáncer de seno metastásico, a quien la computadora, luego de analizar más de 175.000 datos, le dio 20 por ciento de probabilidad de morir, mientras que los médicos le dieron apenas el 9. Murió a los 15 días. Lo mismo ocurrió con un estudio publicado en la revista NPJ Digital Medicine, en la que los investigadores de las universidades de California, San Francisco, Chicago y Stanford analizaron datos de 216.000 pacientes admitidos en hospitales de Estados Unidos.

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El algoritmo predijo la muerte con 95 por ciento de certeza, comparado con 85 por ciento de los métodos convencionales. También pronosticó mejor las estadías largas y las readmisiones inesperadas. Actualmente, los médicos tienen información limitada para hacer estos pronósticos, pero con este algoritmo será posible procesar los datos del paciente (exámenes de sangre y notas de los médicos) y saber si morirá, será dado de alta o regresará en 30 días.

Cifra

68 por ciento ha aumentado la actividad nocturna de los animales en respuesta a la pérdida de su hábitat en favor de los humanos. Así lo registró la investigación publicada en la revista ‘Science’ que analizó 72 estudios con 62 especies mamíferas de todo el mundo.