MORIR DE AMOR

El uso de productos afrodisíacos puede llegar a ser mortal.

1 de enero de 1996

LOS AFRODISIAcos han existido y existirán siempre. Y aunque los estudios científicos han mostrado que su acción tiene más que ver con la creencia de la gente en sus beneficios que con efectos físicos reales, los productos para aumentar el deseo sexual parecen tener más demanda que la consulta al sexólogo. Ungüentos, pócimas y brebajes son vendidos en todo el mundo como la panacea para aumentar la pasión. Quien los compra está convencido de que lo peor que puede pasar es que no funcionen pero que nada pierde con intentarlo. Sin embargo el precio de una pócima de amor puede ser la propia vida.
Según dijeron la semana pasada las autoridades de salud de Estados Unidos, los afrodisíacos pueden ser mortales. El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades -CDC- informó que, sólo en Nueva York, en los últimos tres años han cobrado las vidas de cuatro hombres. Las investigaciones sobre varios productos vendidos para aplicación en la piel mostraron que estos contenían digoxina, un estimulante cardíaco, y esteroides con un efecto similar. En dos de los cuatro casos los hombres murieron por problemas del corazón a las 24 horas de haberlo ingerido.
Los investigadores señalaron que el producto que causó la muerte de estos hombres se vende en un pequeño paquete marrón con nombres como 'Piedra del Amor' y 'Duro como Roca'. Pero se trata de uno de los miles que se encuentran en el mercado y que generalmente no traen instrucciones para su uso ni una lista de ingredientes. Y no deja de ser una ironía que una pócima para el amor tenga un efecto fulminante para el corazón.