¿Tiempos difíciles?

Después de los 50 muchas mujeres piensan que el sexo es cosa del pasado.

18 de diciembre de 2000

Con la menopausia llega el déficit hormonal y con éste el peligro de que se deteriore la vida sexual de la mujer y, en consecuencia, su relación de pareja. La disminución en la producción de estrógenos que se da durante la menopausia afecta las mucosas y disminuye la elasticidad de la piel. Estos cambios hormonales pueden volver dolorosas las relaciones sexuales e inclusive producir una pérdida de la libido o deseo sexual.

Médicamente, “lo único que mejora la lubricación de la piel es el reemplazo de estrógenos”, asegura el ginecólogo Gilberto Martínez. Sin embargo existen cremas y óvulos, como el Estriol, o geles hídricos derivados de estrógenos que se pueden aplicar localmente antes de iniciar la relación para mejorar el tejido, lubricándolo.

Los tratamientos con estrógenos ayudan también a mejorar el aspecto emocional pues los estudios demuestran que disminuyen el efecto depresivo de la menopausia. Para la sicóloga Luz Marina de Granados las causas de depresión más frecuentes en las mujeres entre 45 y 55 años son el síndrome del nido vacío —es decir, la sensación de vacío y soledad que se presenta cuando los hijos parten de la casa— y el ver que la belleza se pierde con los años.

Una mujer en edad madura debe ser consciente de que la responsabilidad de tener una vida sexual placentera es suya y de nadie más. Muchas creen que por haber llegado a la menopausia han perdido el derecho de alcanzar un orgasmo. La solución a este problema está en la actitud que tome cada mujer. No existen fórmulas generales que se puedan aplicar pero sí existen algunas recomendaciones. “Es importante que una mujer a la que le llega la menopausia se mantenga activa intelectual y físicamente”, aconseja la doctora Granados. Esto con el fin de alimentar la autoestima y de sentirse productivas y actuales. También es importante que la mujer acepte que el paso del tiempo es inevitable pero que esto no quiere decir que sus atractivos hayan desaparecido, simplemente se transforman. Los atractivos son otros pero con igual o mayor belleza. Todo depende de qué tanto se sepan manejar y se logre aceptar los cambios que llegan.

Si bien la responsabilidad del éxito de una relación sexual es de cada individuo la pareja juega un papel importante. El compañero sexual debe encargarse de estimular la autoestima de la mujer y ser consciente de que no es sólo ella quien ha dejado de tener un cuerpo de 15. “Muchas veces los hombres creen que la esposa es la única que ha cambiado y no se detienen a pensar en si su ‘atractivo de jóvenes’ aún existe”, comenta un especialista.

Tener 50 años no es el fin del mundo y mucho menos el de la sexualidad. Así que dele rienda suelta a la imaginación, discuta el tema con su pareja, manténgase activa y no le dé miedo experimentar. Después de todo usted sigue siendo tan bella y tan activa como lo decida.