La importancia del peso al momento de la quimioterapia. | Foto: istock

Cáncer

Vida moderna: 5 notas breves

Algunos datos curiosos marcan la semana: un estudio afirma que las mujeres que ganan más que su pareja tienden a fingir orgasmos, estimaciones indican que diez minutos de ejercicio diario previenen muertes prematuras y una investigación precisa que el lenguaje que confunde puede poner en riesgo la salud de las mujeres. Lea más, aquí.

5 de febrero de 2022

Las notas breves de esta semana llegan por cuenta de curiosos estudios. ¿Qué dicen?

1. Antes de la quimio hay que adelgazar y los resultados serán mejores

Los pacientes a los que se les prescribió ejercicio vigoroso antes de la quimioterapia podrían duplicar la posibilidad de que su tumor se reduzca. Los hallazgos provienen del primer estudio de este tipo, publicado en línea en el British Journal of Sports Medicine.

A la mitad se le pidió que tomara parte en un programa de acondicionamiento físico estructurado de unos 150 minutos de ejercicio aeróbico, más dos sesiones semanales de entrenamiento de fuerza. Esto continuó, en promedio, durante cinco meses hasta el día antes de la cirugía. Durante este tiempo, se sometieron a cuatro rondas de quimioterapia.

Después de la quimioterapia prequirúrgica, el grupo que hizo el ejercicio tuvo tasas más altas de reducción del tumor que los pacientes tratados de manera convencional. En total, el crecimiento de estas masas se redujo en el 75 por ciento del grupo, en comparación con el 37 por ciento de los pacientes restantes.

2. El dato: adiós a la EEI

2031 es el año en que la Nasa destruirá la Estación Espacial Internacional, una estructura de 109 metros, cuyos pedazos caerán en el océano Pacífico.

La Nasa destruirá Estación Espacial Internacional. | Foto: istock

3. Ejercicio físico: solo diez minutos

Diez minutos de ejercicio diario puede evitar una muerte prematura. | Foto: istock

Eso es todo lo que necesita de ejercicio moderado a diario para prevenir una muerte prematura, según un artículo publicado la semana pasada en la revista JAMA Internal Medicine. De acuerdo con el trabajo, si todo el mundo siguiera este consejo, se prevendrían más de 111.000 muertes cada año. El reporte resalta la importancia de la actividad física diaria, pero lo más importante es que señala el mínimo de tiempo que se necesita para tener el gran beneficio de prolongar la salud. El estudio fue hecho por investigadores del National Cancer Institute y los CDC.

4. Sexualidad: orgasmos engañosos

Mujeres que ganan más que su pareja tienden a fingir orgasmos. | Foto: istock

Según un estudio, las mujeres que ganan más dinero que su pareja tienen el doble de probabilidades de fingir orgasmos durante las relaciones sexuales que las que ganan menos. Esto sucede cuando ella detecta una masculinidad frágil. Algunas fingen el clímax para proteger los egos de los hombres que carecen de confianza en sí mismos o no se sienten cómodos con el hecho de que su pareja es la que más gana. El trabajo fue realizado por científicos de la Universidad del Sur de Florida y publicado en Social Psychological and PersonalityScience.

“Las mujeres pueden intentar neutralizar la amenaza de masculinidad de ganar más que sus parejas asegurándoles que son buenos en la cama”, escriben los autores. En el estudio alrededor del 30 por ciento de las mujeres ganaban más que su media naranja. Los datos muestran que el 27 por ciento de ellas fingen orgasmos, en comparación con el 13 por ciento de las que no lo hacen.

5. Salud reproductiva: lenguaje que confunde

Un lenguaje inapropiado pone en riesgo la salud de las mujeres. | Foto: istock

Referirse a las mujeres como “dadoras de luz”, cambiar “madres” por “personas embarazadas” o modificar “lactancia materna” por “padres lactantes” en los trabajos de investigación podría poner en riesgo la salud de las mujeres y décadas de trabajo para mejorar el sesgo de género en la literatura médica.

El mensaje llega después de que algunos hospitales en Europa implementaran formalmente una política de lenguaje inclusivo de género para los servicios de maternidad en el que dicen “leche humana” y no “leche materna”. Hacerlo, dice el trabajo, reduciría la protección de la madre y socavaría la lactancia materna.