Epidemia preocupante

Las cifras de maltrato infantil en Colombia son alarmantes. A pesar de las campañas que se han adelantado en los últimos años el problema está muy lejos de encontrarse bajo control. Según cifras de la Fundación Afecto el maltrato infantil ha llegado a adquirir las dimensiones de una epidemia pues se presenta en 36 por ciento de las familias colombianas. En países como Estados Unidos esta cifra a duras penas llega a 2 por ciento y allí es motivo de gran preocupación.

Por este motivo la Fundación Afecto y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar organizaron un congreso de maltrato infantil, que se llevará a cabo en la sede de la Gobernación de Cundinamarca los días 13, 14 y 15 de agosto. El objetivo del evento es ilustrar, informar y preparar a médicos, profesores de educación primaria y media y jueces de la República sobre el tema. "No existe un entrenamiento formal para que estas personas puedan detectar los casos", dice Isabel Cuadros, directora de la Fundación. Es muy común que en los juzgados se presenten casos en los que la víctima de abuso sexual resulta ser la responsable de su mal. Algunas veces argumentan que los niños incitan a los padres al abuso. En otros los abogados alegan que las heridas se las provocan las víctimas para acusar injustamente a sus agresores. "Lo que se pretende es que la gente acepte que este problema existe y no es exclusivo de sectores marginados sino que afecta a todos los estratos de la sociedad", agrega.

Este panorama tan desalentador merece que se unan varias disciplinas para tratarlo y por ello se ha invitado a expertos en prevención de maltrato infantil, como Maggie Escartin, una trabajadora social de Australia que hablará de cómo prevenir el abuso sexual de los pequeños. El congreso contará además con la presencia de peritos especializados en diagnosticar los casos para poder llevarlos a un estrado judicial. Uno de ellos es Walter Lambert, médico pediatra y profesor de la clínica pediátrica de la Universidad de Miami, Estados Unidos, que hablará sobre técnicas para detectar cambios en el niño que permitan deducir que es o ha sido víctima de maltrato físico o sexual.

En los casos de maltrato es muy importante aislar al niño de ese entorno familiar amenazante. En Colombia este es un problema difícil de manejar puesto que no existen herramientas jurídicas que permitan protegerlo de una manera adecuada. Muchos de los padres agresores demandan a quienes los acusan por calumnia e injuria y logran mantenerse en la impunidad, agravando la situación del menor ultrajado. Se ha dado el caso extremo de niños que al no ver una solución real a su problema optan por el suicidio. Sobre cómo hacer una protección integral a los pequeños hablará José Díaz Huertas, director del programa de Atención al maltrato infantil de la comunidad de Madrid. Otro objetivo del congreso es plantear soluciones concretas al problema y por eso han invitado a expertos en el tema de la cultura del buen trato, prácticas de crianza humanizada, entre otros temas.