DE LA TIZA AL MOUSE

Los computadores dejan de ser un lujo en las escuelas oficiales para convertirse en herramienta de trabajo.

4 de mayo de 1998

Una de las mayores limitaciones a las que se enfrentan los colegios y escuelas oficiales es el acceso a la tecnología y su incorporación a la enseñanza. Este problema es particularmente grave si se tiene en cuenta que, debido a los ajustados presupuestos, dichos planteles a duras penas disponen de medios para pagar los salarios de los maestros y cubrir sus necesidades logísticas. En Colombia nadie se alarma cuando se entera de que muchos alumnos tienen que asistir a clases en aulas que no disponen de los más elementales implementos. Tampoco es un secreto que los maestros salgan a las calles a protestar para exigir el pago de sus mesadas. Por dichas circunstancias no es de extrañar que en las aulas no se disponga de pupitres o de simples tizas. Sin embargo algunas instituciones tratan de cambiar esta situación y se preocupan porque sus alumnos empiecen a familiarizarse con el mundo de los computadores y la cibernética. Este es el caso de algunas concentraciones escolares de la ciudad de Tunja que, superando sus afugias presupuestales, han empezado a implementar programas para que sus muchachos tengan acceso a los computadores como herramienta adicional en su formación académica. Este programa hace parte de un convenio adelantado con la Alcaldía de esa ciudad en conjunto con Futurekids, empresa multinacional especializada en la pedagogía de computación. La base de este método son las Aulas Informáticas Municipales, creadas para capacitar gratuitamente a estudiantes y docentes de diferentes colegios públicos en el manejo del computador. Para lograr tal objetivo el municipio provee el salón y los computadores mientras que Futurekids suministra el personal docente y el mismo software que utiliza en centros de enseñanza privados y en sus propias sedes. La característica principal de este sistema es que los estudiantes no reciben materias específicas sobre el manejo de las máquinas o los programas sino que deben hacer uso de éstos para desarrollar proyectos específicos. Así, y casi sin darse cuenta, los muchachos aprenden a utilizar esos recursos de una manera muy productiva. Con este método no se pretende reemplazar las asignaturas del pensum oficial sino complementar su contenido y desarrollar nuevas destrezas de los alumnos. Aunque en la etapa actual los instructores pertenecen en su totalidad a Futurekids, éstos a su vez están entrenando a los maestros para que en el futuro sean ellos mismos quienes lideren todo el proceso. El programa ha gozado de gran aceptación entre estudiantes, docentes y padres de familia, para quienes hasta hace poco los computadores eran una herramienta extraña o totalmente desconocida. La idea es extender este servicio a la mayor cantidad posible de municipios del país con el objeto de preparar mejor a la juventud para el próximo siglo, cuando la tecnología ya no será un lujo sino una necesidad. Los interesados en este programa pueden comunicarse con los teléfonos 620 0339 ó 620 0030 de Bogotá.