“Se busca compartir puntos de vista, de cuidado y entender cómo las comunidades étnicas abordan el reto del coronavirus. Cómo salvaguardar la vida, cómo cuidar los hábitos alimenticios, cómo abordar el tema de los grupos étnicos y tal vez repetir estas experiencias en otras comunidades en el mundo”, dijo Manuela Ángel, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) al comenzar la charla.
En la discusión se abordaron varios temas alrededor de la autonomía de los consejos comunitarios en la lucha contra el coronavirus, y cómo la gobernanza y el mirar dentro de las propias comunidades han sido estrategias claves contra la crisis.
Así lo reconoce Januar Chaverra Barco, socio fundador y gerente actual de la Asociación de Productores del Medio Atrato (Asprodema), “Es precisamente con el apoyo de los consejos comunitarios que hemos podido sostenernos en la pandemia”. La búsqueda por incentivar el trabajo colectivo y la articulación de los líderes en la zona del Atrato ha evitado que las comunidades rurales se desplacen a los cascos urbanos.

La charla, encabezada por Derly Aldana (FAO) se realizó a través de Zoom.
La articulación de las comunidades con los gobiernos departamentales, así como con la políticas nacionales, también han sido clave para que los pobladores del Atrato no pierdan el contacto y puedan luchar contra la crisis sanitaria y económica. “Se ha visto un fortalecimiento familiar y comunitario, aumentando la participación de los jóvenes y las mujeres cuidadoras del hogar en los procesos que se han gestado en la zona", dijo Chaverra.
Esta estrategia también se ha dado en Acandí (Chocó), como cuenta Everlidys Córdoba, miembro del consejo comunitario COCOMASUR, quien resaltó la importancia de trabajar desde el territorio. Esta reflexión parte de su experiencia: “la pandemia nos llevó a retomar nuestras prácticas productivas para el autoconsumo, no solo para la comercialización”, dijo.
Córdoba reconoce la importancia de dignificar los conocimientos que existen en la zona, pues gracias a estos se han podido cuidar y han mantenido su seguridad alimentaria. Estos procesos surgen por su capacidad de auto gobernanza y organización.
La pandemia, concluye Córdoba, ha evidenciado las falencias a las que se enfrentan como minoría, así como la necesidad de fortalecer las organizaciones internas y los consejos comunitarios para no depender solamente de la institucionalidad o de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).
El coronavirus también ha acercado a las comunidades y les ha recordado la importancia de cuidar sus tradiciones ancestrales. “Los jóvenes han entendido que los mayores son nuestro pilar, son nuestra voz de la experiencia, dirigen todos los procesos que se llevan a cabo en el municipio”, dice Keinel Simarra, representante legal del Consejo Comunitario MA-KANKAMANÁ de San Basilio de Palenque.

©FAO
A pesar de que la pandemia les ha vulnerado algunas de sus prácticas culturales, también les ha permitido defender y cuidar su independencia, retomando 400 años de tradición. Un trabajo mancomunado a partir de cuidar la lengua, las costumbres y las tradiciones, concluye Simarra.
La charla, organizada por la FAO en conjunto con la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo, permitió a los asistentes conocer más sobre las luchas que se han dado en comunidades afro y palenqueras contra la pandemia. El encuentro forma parte de la serie Grupos étnicos y covid-19, que se desarrollará durante todo el mes de Julio, para conocer más experiencias de otras comunidades en el país durante la crisis.