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La vitamina D ayuda a mantener los huesos fuertes y saludables.
La vitamina D ayuda a mantener los huesos fuertes y saludables. | Foto: Getty Images

Vida Moderna

Estos son los mejores alimentos para fortalecer los huesos y las articulaciones

Los huesos pueden quebrarse con facilidad si su cuidado es deficiente.

Redacción Semana
8 de septiembre de 2023

El cuidado de las estructuras óseas es un elemento clave durante el desarrollo de la vida del ser humano, a medida que avanza la vida, es normal que estas vayan sufriendo cierto desgaste el cual afecte su resistencia y fortaleza, sin embargo, algunos de estos daños pueden ser alivianados si se adquieren ciertos hábitos de cuidado desde edades tempranas.

Entre los hábitos más reconocidos claramente se encuentra la alimentación, pues es a través de esta que el cuerpo se ve nutrido y potenciado en cada una de sus capacidades, por lo que el consumo de ciertos elementos, puede permitir que los huesos se mantengan en un estado fuerte y resistente.

Mantener un buena salud de los huesos es fundamental para poder desempeñar las actividades diarias.
Mantener un buena salud de los huesos es fundamental para poder desempeñar las actividades diarias. | Foto: Getty Images

Según explica el portal Kids Health, es importante que el cuidado y fortalecimiento de los huesos se vaya presentando desde la niñez, dando paso a que el desarrollo físico de los infantes se presente de manera adecuada, y evitando fracturas u otras lesiones que atrasen este avance.

Teniendo esto en cuenta, y la mención de los minerales claves con anterioridad, es de vital importancia que los niños en su alimentación cuenten con alimentos como la leche, los frutos secos, las semillas y las verduras verdes, especialmente si se ven potenciados con la presencia de otros elementos claves como por ejemplo, el jugo de naranja o los cereales.

Los garbanzos son fuente de proteínas como el calcio, potasio, hierro, fósforo, magnesio, folatos, niacina, vitamina B6 y vitamina E.
Los garbanzos son una legumbre con fuente de proteínas como el calcio, potasio, hierro, fósforo, magnesio, folatos, niacina, vitamina B6 y vitamina E. | Foto: Getty Images

Otra opción, es utilizar alternativas a alimentos comunes, los cuales se basen en elementos que posean una gran cantidad de los minerales previamente mencionados, por ejemplo, en vez de comprar mantequilla común, se puede consumir mantequilla de almendras, o jugos de naranja que posean altas cantidades de calcio en su composición, ya que de esta manera se va a poder priorizar el beneficio para estas partes del cuerpo humano.

En caso de querer potenciar el desarrollo de los huesos, o de sospechar que este se está presentando de manera deficiente, es clave visitar a un nutricionista, el cual pueda evaluar este impacto en la salud, y explicar en qué cantidad es necesario el consumo de los alimentos mencionados con anterioridad, con el objetivo de poder beneficiar a las estructuras óseas.

Es importante mencionar que existen otro tipo de prácticas para poder fortalecer los huesos, más allá del consumo de ciertos alimentos, como lo explica el mismo portal previamente mencionado, como lo es la ingesta de suplementos de vitamina D, ya que estos permiten potenciar la absorción de calcio por parte del cuerpo humano, lo que se puede complementar con los hábitos alimenticios nombrados con anterioridad.

El consumo de este alimento trae múltiples beneficios para el cuerpo humano.
El consumo de este alimento trae múltiples beneficios para el cuerpo humano. | Foto: Getty Images

De la misma forma, es claramente importante la realización de ejercicio físico, pues a causa de esto es que los huesos podrán adquirir ciertas cargas diariamente, los cuales puedan ir fortaleciéndolos progresivamente, sin embargo, es necesario que sea realizado poco a poco, ya que de lo contrario, se corre el riesgo de que se puedan quebrar.

Con estos fines, es importante poder generar conciencia en los jóvenes respecto a su salud ósea, especialmente de cara a edades más avanzadas donde su desgaste puede ser importante, si no se incurre en estos cuidados desde edades tempranas, por lo que este tipo de cuidados deben ser priorizados desde etapas de la vida, como por ejemplo, la niñez, la adolescencia, o la pre adolescencia, durante las cuales se lleva a cabo la mayor parte del desarrollo físico.