El juez que le echó la culpa a Maya

15 de enero de 2015

Un dato derivado de una decisión de un juez pasó inadvertido al final del año. Por cuenta de la terminación del contrato de arrendamiento del edificio donde funcionó la Contraloría, el sindicato de la entidad interpuso una tutela en la que solicitaba a la Justicia que protegiera el derecho al trabajo, entre otros temas. El juez la negó y de paso la emprendió contra el actual contralor, Eduardo Maya. Dijo que él tuvo la posibilidad de tomar decisiones previamente y no lo hizo, lo que produjo que la entidad quedara sin sede. Le dice, además, que la actuación de la cabeza del organismo de control careció de una oportuna planificación y organización administrativa. Es decir que Maya, que se encontró con el problema, terminó crucificado.