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| Foto: Archivo.

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Berlusconi, expulsado del Senado italiano

El exprimer ministro dice que es un día de 'luto para la democracia' y sostiene su inocencia por el delito de fraude fiscal.

27 de noviembre de 2013

El Senado italiano decidió este 27 de noviembre, la retirada del escaño en la Cámara Alta del exprimer ministro Silvio Berlusconi por su condena a cuatro años de prisión por fraude fiscal que el Tribunal Supremo de Italia le impuso el 1 de agosto. La pena quedará reducida a un año por el delito de fraude fiscal cometido a través de una de sus empresas, el coloso televisivo Mediaset.

El pleno de la Cámara Alta rechazó las nueve propuestas presentadas por varios senadores para que no se le aplique a Berlusconi la llamada "Ley Severino" del Gobierno de Mario Monti, la cual establece la expulsión del Parlamento de los condenados a penas superiores a dos años de cárcel.

El exprimer ministro alertó hoy a sus rivales políticos de que no "han ganado definitivamente" la batalla con su expulsión del Senado por dicha pena, un hecho que, a su juicio, hace de éste un día "amargo" y de "luto" para la democracia.

"Más allá de la conmoción, que creo no es solo mía, sino por vuestras miradas creo que es también vuestra, estamos aquí en un día amargo, un día de luto para la democracia", dijo el político y empresario durante una multitudinaria concentración convocada en su apoyo ante su céntrica residencia romana, el Palacio Grazioli.

"Brindan porque han llevado a un adversario, a un enemigo, según dicen algunos, ante un pelotón de ejecución, lo que habían esperado desde hace 20 años. Por eso hoy están eufóricos. (...) Pero no creo que con esto hayan vencido definitivamente al partido de la democracia y la libertad. Nosotros no nos retiraremos a ningún convento", agregó.

El líder conservador calificó esta concentración como "legítima y pacífica" y arremetió, como acostumbra, contra los magistrados de izquierda, quienes han querido, en su opinión, quitarle de en medio de la vida política.

"Mi condena está basada en teoremas y conjeturas, no está basada en ningún hecho, en ninguna declaración sobre ningún testimonio (...) Con esta sentencia, que clama venganza ante Dios y los hombres, el Senado, es más, no todo el Senado, sino nuestros aliados de Gobierno, se han apresurado a mi expulsión", señaló el ex primer ministro, quien fue largamente aplaudido.

"En los casos precedentes, los plazos empleados eran de media de catorce meses. Conmigo, en tres semanas todo se ha resuelto (...) No han querido hacer como la ley imponía. Han aplicado retroactivamente a hechos de hace 30 años una ley aprobada el año pasado, violando un principio de base de todo ordenamiento jurídico, el de la no retroactividad", añadió.

Berlusconi se preguntó en voz alta qué ocurrirá si las instancias judiciales europeas a las que ha recurrido terminan dándole la razón, absolviéndole por la condena e invalidando la aplicación retroactiva de la llamada "Ley Severino", que conmina a los condenados a penas superiores a los dos años a ser expulsados del Parlamento.

El exprimer ministro pretende, además, reabrir ante la Corte de Apelación de Brescia (norte de Italia) el caso por el que fue condenado en base a nuevos documentos y testimonios que dice tener en su poder o estar a punto de recibir.

"Presentaremos la solicitud de revisión del proceso a la Corte de Apelación de Brescia y estoy absolutamente seguro de que darán la vuelta a la sentencia con mi absolución plena. Y entonces, estos señores, ¿qué harán? ¿Me dejarán volver al Parlamento? ¿Me indemnizarán? La respuesta no existe", indicó.

Berlusconi, quien se calificó de "soldado de la democracia", apostó de nuevo por la elección directa del presidente de la República y emplazó a sus seguidores a una nueva Italia mejor cuando su partido vuelva a ganar las elecciones.

Por otro lado, aludió a sus excorreligionarios en el Pueblo de la Libertad (PDL), entre ellos el viceprimer ministro, Angelino Alfano, quienes decidieron escindirse y no acompañarle en el relanzamiento del partido Forza Italia, tras lo que fue interrumpido por los manifestantes que gritaban "traidores".

"Otros se han ido... Pero nosotros seguimos aquí. Estamos convencidos de estar en el lado adecuado, seguros de que no traicionaremos nunca a nuestros electores", subrayó Berlusconi, en referencia a Alfano y los suyos, quienes mantienen el apoyo al Gobierno de coalición de Enrico Letta

El expresidente del Gobierno italiano consideró el pasado 23 de noviembre que se perpetraría "un golpe de Estado"de votarse su expulsión del Senado. También aseguró entonces que estaba muy "preocupado" y que no dormía "desde hace cuatro días" porque en el país se producía lo que llamó un ataque a la libertad.

Durante esa participación, también aseveró que que el Jefe de Estado, Giorgio Napolitano, tiene que concederle "la gracia", el perdón de la pena, porque se trata de una injusticia, aunque agregó que él nunca la pedirá porque es inocente.

"Yo soy inocente. No tengo nada que perdonar", exclamó Berlusconi ante los jóvenes de su partido que le aclamaron la semana pasada. "No dejaremos que este golpe de Estado se realice sin una reacción nuestra", amenazó, y agregó que quería un país donde "los jueces no usen sus poderes para atacar a los enemigos políticos".