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El sargento de la Policía Luis Alberto Erazo (c) desciende de un avión el domingo en Bogotá. El uniformado había sido secuestrado el 9 de diciembre de 1999, por las Farc. | Foto: EFE/Mauricio Dueñas

REENCUENTRO

Sargento Luis Alberto Erazo ya se reunió con su familia

El único sobreviviente de matanza de uniformados secuestrados por las FARC ocurrida el sábado, llegó a la capital con visibles heridas en su rostro y enfundado en un uniforme de la Policía, institución a la que seguirá perteneciendo. Ya se encontró con su familia y con el presidente Juan Manuel Santos.

27 de noviembre de 2011

Proveniente de las selvas del Caquetá llegó al aeropuerto militar de Catam de Bogotá en una aeronave de la Policía el sargento de esa institución Luis Eduardo Erazo quien estuvo 12 años en poder de las Farc y único sobreviviente de la matanza de cuatro miembros de la Fuerza Pública que ese grupo mantenía secuestrados al sur del país.

Tan pronto llegó, el uniformado bajó y saludó a las cámaras de los medios a la distancia para luego incorporarse en una ambulancia que lo esperaba y que lo transportará al hospital de la Policía para los chequeos médicos de rigor. No dio ninguna declaración en medio de la gruesa lluvia que lo recibió.

Hacia las 5:00 p.m. el exsecuestrado recibió la visita del presidente Juan Manuel Santos en esa dependencia sanitaria, que fue registrada por una fotografía divulgada en el perfil de Twitter de la Presidencia (ver en columna derecha). Allí se le ve de espaldas, con la cabeza rapada y en camiseta, en compañía de su familia.
 
A su arribo, Erazo exhibía visibles heridas en el rostro, cubiertas por vendaje color piel.
 
Según informó en la noche del sábado el ministro de Defensa, cuando Erazo logró escapar en medio del duro enfrentamiento entre las tropas y los insurgentes de las Farc, tres guerrilleros lo persiguieron y lo atacaron con granadas, cuyas esquirlas recibió el fugado en la cara y el resto de su humanidad.

Durante el operativo militar que se dio en la mañana del sábado, fueron asesinados por la guerrilla con tiros de gracia -mientras estaban encadenados- el sargento del Ejército Libio José Martínez, el coronel de la Policía Édgar Yesid Duarte, el mayor de la Policía Elkin Hernández Rivas y el subintendente de la Policía Álvaro Moreno.

El episodio fue también un recordatorio de la orden emitida hace varios años por el Secretariado de las Farc, de que los secuestrados fueran ejecutados si llegaba a haber algún operativo de rescate o presencia de la Fuerza Pública en las cercanías.

Erazo logró salir corriendo cuando las tropas tomaron por sorpresa el campamento donde se encontraba con los demás uniformados secuestrados, en la mañana del sábado. Tras eludir a sus perseguidores logró ocultarse en la espesura de la selva y permaneció allí, herido, por lo menos ocho horas.

Hacia las 6:40 de la tarde, al sentir el ruido de los militares que con motosierras tumbaban vegetación para permitir el aterrizaje de un helicóptero que transportaba el personal del CTI para adelantar la investigación forense y el levantamiento de los cuerpos, decidió acercarse.

Fue allí cuando "se acercó a las tropas y fue atendido, rescatado y estabilizado", manifestó Pinzón en su comparecencia ante los medios de comunicación. Erazo permaneció esa noche en el terreno y fue transportado en la mañana del domingo hacia Florencia, de donde partió hacia Bogotá en horas de la tarde.

Encuentro con Santos

El presidente Juan Manuel Santos dijo que fue "realmente conmovedor" ver a Erazo con buen estado de ánimo y con deseos de permanecer en la institución.

"Fue realmente conmovedor ver a este héroe de la patria, casi 12 años secuestrado, en ese estado de ánimo, queriendo seguir en su institución, luchando por el país diciendo cómo esta maldita guerra tiene que terminar", dijo el mandatario tras concluír la visita.

Santos detalló que, en la visita, el sargento Erazo les explicó "cómo le han tratado durante este tiempo que estuvo secuestrado y torturado. El 9 de diciembre cumplía 12 años" en poder de las Farc.

"Nos contó las últimas horas, sus últimos días, cómo se salvó, corriendo para un lado y escondiéndose en un tronco", agregó el mandatario.

Además, Santos resaltó que el ya exsecuestrado le agradeció haber encabezado los operativos militares puestos en marcha por la Fuerza Pública: "Estoy vivo gracias a Dios y a ese apoyo que siempre obtuvimos", dijo el presidente al citar a Erazo.

Sin embargo, ël jefe de Estado admitió tener sentimientos encontrados al celebrar el regreso a la libertad de Erazo y lamentar al tiempo la suerte de los otros tres policías y el militar, y destacó "el heroísmo de quienes fueron asesinados a mansalva".

Asimismo, llamó al país y a la comunidad internacional "para repudiar las acciones tan crueles de ese grupo que cada vez muestran más sevicia y más crueldad".

Los restos de Hernández, Martínez, Duarte y Moreno llegarán a Bogotá en las próximas horas si las condiciones meteorológicas lo permiten, después de una jornada de espera.

Santos adelantó que las exequias de los cuatro fallecidos se celebrarán seguramente el próximo martes.
 
Con EFE