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EL CONGRESO SE ENFRENTA A SUS PRIMERAS ELECCIONES DESPUÉS DE VIVIR EL PEOR CUATRiENIO DE SU HISTORIA

ELECCIONES

Un voto vital

En esta jornada democrática se definirán el futuro del uribismo, la suerte de los independientes y el rumbo del conservatismo.

13 de marzo de 2010

Los comicios de este domingo son los más cruciales de la historia reciente y, paradójicamente, los que menos pantalla pública han tenido. El tortuoso trámite del fracasado referendo acaparó todos los reflectores y cuando se hundió hace dos semanas, el país se vio frente a un escenario en el que todo está por resolver.

El mundo político estaba ensimismado en la encrucijada del alma del presidente Álvaro Uribe, y de repente se dio cuenta de que llegaron las elecciones de Congreso y las consultas internas de los partidos Conservador y Verde. Y que de ellas depende cómo se van a mover las placas tectónicas de la política en la era pos-Uribe. Lo siguiente es lo que está en juego este domingo?


1 El termómetro del uribismo
Dos resultados son claves para el uribismo: el de sus dos partidos en el Congreso, la U y el PIN, y el de la consulta conservadora.

Esta vez la carrera por la Casa de Nariño será la más corta de la historia y los resultados del domingo servirán como una encuesta que dirá la verdad sobre quien tiene mayor músculo en las urnas. Si bien la maquinaria de los congresistas no necesariamente se le endosa al aspirante a la Presidencia, sin duda será mucho mejor para cualquier candidato llegar a la recta final apoyado por un partido victorioso.

Los analistas en general consideran que la U será uno de los partidos más votados, y en ese sentido el candidato Juan Manuel Santos podrá sentirse más cómodo. Pero también es cierto que arranca con una cuota inicial relativamente alta y si la U no supera las curules alcanzadas hace cuatro años, sus competidores dirán que ha perdido terreno. En 2006 sacó 20 senadores y 33 representantes a la Cámara. Y terminó el período, gracias al transfuguismo, con 24 senadores y 40 representantes.

En cuanto al otro partido, el PIN, la segunda división del uribismo, sus resultados pueden ser una especie de caballo de Troya para Juan Manuel Santos. Si el grupo gana todas las curules que espera, le daría mucha fuerza electoral a Santos. Pero se podría convertir en un peligroso bumerán entre la ciudadanía por los cuestionamientos que produjo su creación poco transparente.

Los conservadores, la tercera pata de la mesa del uribismo, tienen por su parte la ventaja de que su consulta interna atraerá más votos de los que tradicionalmente ha captado el partido azul en el Congreso.

Ese sin duda será el resultado más importante para el uribismo en las elecciones del domingo. Con el presidente Álvaro Uribe fuera de concurso, es crucial para el uribismo saber quién va a pelear (o a compartir) con Santos su herencia electoral. En teoría, si gana Andrés Felipe Arias lo más posible es que se una a Juan Manuel Santos para la primera vuelta presidencial. Y si gana Noemí Sanín es casi fijo que llegarían separados el 30 de mayo. Por eso, la historia será muy distinta para el uribismo, según el resultado final del pulso entre Arias y Sanín.


2 La 'purga' del Congreso
El Congreso de la República tiene este domingo una prueba ácida. Se enfrenta a sus primeros comicios después de vivir el peor cuatrienio de su historia. Las investigaciones de la para-política pusieron en tela de juicio a uno de cada tres congresistas. De los 268 congresistas elegidos en 2006, 85 fueron investigados o lo están siendo por sus nexos con los paramilitares. Van 15 condenados y 13 llamados a juicio.

Los resultados de este domingo dirán qué tanto se han consolidado los votos de dudosa procedencia. Hay partidos cuestionados como el PIN -que tiene cuotas de seis condenados por para-política y de cuatro más que están llamados a juicio o en investigación- o Apertura Liberal, donde encontraron cobijo los seguidores de la pirámide DMG.

Pero también en los partidos tradicionales se colaron nombres controvertidos. En el partido de la U, por ejemplo, está Maritza Martínez, esposa del ex senador Luis Carlos Torres, y también Jorge Visbal Martelo, estos últimos investigados por para-política.

En el Partido Liberal no resistieron la tentación de abrirle campo a Arleth Casado, la esposa de Juan Manuel López, que a pesar de estar condenado, le pone más de 100.000 votos. Y en el Partido Conservador incluyeron, entre otros, a Olga Suárez Mira (hermana de Óscar, investigado por para-política), Carlos Barriga (investigado por para-política) y Lina Barrera (la esposa de Iván Díaz Mateus, condenado por la yidis-política).


3 Independientes: de vida o muerte
Estas elecciones son un verdadero reto para los dos partidos independientes de mayor recordación: el Verde, el de los 'tres tenores' Enrique Peñalosa, Antanas Mockus y Lucho Garzón; y Compromiso Ciudadano, de Sergio Fajardo. Ambos integraron sus listas con candidatos de excelente calidad, con hojas de vida llenas de experiencia, conocimiento y transparencia pero, paradójicamente, con pocos votos. Algunos les criticaron a los tres ex alcaldes de Bogotá y al ex alcalde de Medellín su falta de olfato político. Pero ellos optaron por la consistencia. "Uno no puede defender la política transparente y tener manzanillos tradicionales en sus listas", repite Peñalosa.

Sin embargo, en un país en el que las prácticas electorales están contaminadas por la repartija de dinero y contratos, así como por la compraventa de votos, el escenario para los independientes nunca ha sido muy alentador. Hace cuatro años la lista de Peñalosa y la de Mockus se chamuscaron porque no alcanzaron el umbral. Ahora los 'verdes' le apuestan a lograrlo para mantener su personería jurídica e inscribir su candidato presidencial.

El caso de Fajardo es todavía más complicado. En su lista al Senado son pocos los que tienen experiencia política. Además, estará identificada con un logo diferente al de las listas a Cámara: mientras inscribió la primera por firmas, inscribió las segundas con la personería de la Alianza Social Indígena. Además, recientemente el CNE le hizo ajustar el logotipo de Compromiso Ciudadano -la mano tricolor-, que venía posicionando desde hace meses.

Como si fuera poco, el partido de Fajardo no tiene plata. Al haber sido constituido sólo a finales de 2009, no contó con recursos de reposición de votos para impulsar sus listas. Muchos analistas prevén que si Fajardo llega a la Presidencia lo hará sin bancada propia o con una muy débil. "Eso no nos preocupa", dice su asesor Germán Medina, mientras reitera que el ex alcalde transformó a Medellín "con el respaldo de un solo concejal elegido por su movimiento".

La fortaleza de las candidaturas presidenciales de Fajardo y de los verdes, y sus posibilidades en el largo plazo, dependerán, en buena medida, de sus resultados este domingo.


4 Qué papel van a desempeñar los nuevos y curiosos partidos
La reforma política de 2003 partió en dos la historia de los partidos, cuyo número redujo sustancialmente. Salieron del escenario 59 colectividades y en las elecciones de 2006 sólo estuvieron 20 en la competencia por el Senado. Para las elecciones de este domingo el número sigue cayendo y ya quedan solo 14 . De todos ellos hay dos que son unos verdaderos desconocidos: el Partido de Integración Social (País) y el Partido Cristiano de Transformación y Orden (Pacto).

Según un informe de lasillavacia.com, País es el mejor ejemplo del partido de garaje. Sus integrantes lo inscribieron por firmas y su sede en la avenida Caracas con calle 22 de Bogotá se sostiene con el arriendo que pagan 100 indigentes por noche. Allí cunde el antiuribismo.

El otro partido nuevo es Pacto. La mayoría de sus candidatos son pastores evangélicos y su creador es Gustavo Páez, doctorado en Teología y dos veces concejal de Bogotá. Pertenece al Centro de Alabanza Oasis, que según él tiene más de 30 iglesias en el país y tiene el apoyo de otras 400 evangélicas. A este movimiento pertenece Vladimir Melo, el concejal que está detenido por supuestamente haber mandado a matar a su esposa.