SALUD

Los puntos clave sobre el cáncer que sufrió John McCain

Los oncólogos dicen que pese a los avances en medicina, el glioblastoma sigue siendo uno de los tumores más agresivos del cerebro. Conozca esta enfermedad a través de estos cinco datos.

28 de julio de 2017

Esta sábado John McCain, senador durante tres décadas, candidato a la presidencia de Estados Unidos en 2008 y un veterano de la guerra de Vietnam falleció de cáncer de cerebro, específicamente de un tipo conocido como glioblastoma, el más común de los tumores letales del cerebro. Es el mismo que terminó hace diez años con la vida de otro colega suyo, el senador Edward Kennedy, y que padeció durante un par de años Beau Biden, el hijo de Joe Biden, antes de morir en 2016.

Para conocer más acerca de esta enfermedad, SEMANA.COM consultó a William Mantilla, hematólogo y oncólogo clínico de la Fundación Cardio Infantil  y resumió en estos cinco puntos lo más relevante de este tipo de cáncer.

1. Qué es el glioblastoma

Muchas personas tienen cáncer en el cerebro pero como consecuencia de otro cáncer. Por ejemplo, un tumor de seno o de pulmón puede generar metástasis en el cerebro, que en ese caso sería un tumor secundario.  El glioblastoma es un tipo de cáncer de cerebro que se origina allí en modo primario, no como consecuencia o metástasis de otros tipos de cáncer.  Se produce en unas células cerebrales que tienen forma de estrella conocidas como astrocitos y que conforman el tejido que soporta el cerebro. “El cerebro es un órgano con una característica especial  pues sus células no se replican y los tumores allí sean raros”, dice Mantilla. “Por eso los tumores cerebrales nacen en otros sitios como por ejemplo en estas células que son el sostén de las células cerebrales. Se clasifican de grado uno a cuatro donde el uno es el más parecido a la célula normal y el cuatro es el más indiferenciado”. 

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2. Por qué es tan agresivo

Por qué no crece como una masa redonda bien delimitada. La principal misión de los  astrocitos es navegar entre las neuronas y por eso el tumor se esparce con gran eficiencia. “Su crecimiento es diseminado y eso hace difícil detectarlo en un solo sitio”, señala Mantilla. La agresividad está dada por el tratamiento pues las medicinas que funcionan para cáncer no son tan efectivas en este órgano debido a que este órgano está protegido por la barrera craneoencefalica. Otro problema es que es dificil erradicarlo totalmente sin evitar daño en funciones cerebrales. “Si en la cirugía se logra resecar la mayor parte del tumor, el desenlace de la enfermedad será mejor”, dice Mantilla. El hecho de que en ocasiones queden rastros del tumor genera alto riesgo de recaídas. El gliblastoma tiene comportamiento local y no se pasan a otros órganos ni generan metástasis por fuera del cerebro. 

3. Causas y síntomas

Según Mantilla este tipo de cáncer tiene un comportamiento elocuente es decir da signos rapidamente porque su crecimiento por lo genral afectan una función: la visual, la auditiva, el habla. Se manifiesta con convulsiones y dolores de cabeza. También se presentan sangrados y deterioro de ciertas habilidades como problemas al hablar, confusión, dificultad al caminar, dependiendo de donde aparezca el tumor en el cerebro. En Estados Unidos se presentan más de 12 mil casos nuevos según la American Brain Tumor Association. En Europa se presentan entre 3 y 4 casos por 100.000 habitantes. En Colombia, según Globocan, se dan 1.8 casos por cada 100.000 habitantes. Durante el crecimiento generan mucho daño. Sus causas son desconocidas pero se creen que la edad es un factor de riesgo. Otro riesgo de común es haber tenido una historia de radiación, generalmente por un cáncer anterior. Al parecer, la mayoría sucede en la última etapa de la vida de manera espontánea.

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4. Cómo es el tratamiento.

Como la mayoría de tumores, el glioblastoma se trata con cirugía, intervención con la cual se pretender remover el máximo tejido tumoral posible sin dañar la zonas cerebrales sanas. Luego el paciente recibe radiación y quimioterapia. Es común que los oncólogos pidan un informe de patología del tumor puesto que algunos tipos responden muy bien a la quimioterapia, generalmente los más jóvenes. En los viejos, estos tumores usualmente adquieren muchas mutaciones y en esos casos contienen en su ADN antígenos que son reconocidos por inmunoterapias. Sin embargo en estudios clinicos hasta el momento los resultados no han mostrado un beneficio fuerte.

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5. Cuál es la supervivencia

Dependiendo del perfil genético del tumor los pacientes pueden vivir hasta 4 años. Pero otros pueden vivir menos de un año. Esto depende de varios factores, según Mantilla, como las características genéticas y epigenéticas del tumor y si en el procedimiento quirúrgico se logró resecar todo el tumor o no. “En general el promedio de vida es más bien corto”. A pesar de esto ha habido avances en los últimos diez años. “Antes era muerte segura pero ahora es posible vivr años con este mal”, concluye. Este cáncer mata porque en la medida en que crece e infiltra el tejido cerebral interfiere en funciones neurológicas normales como ver o caminar y produce edema. Esto último  genera hipertensión y si no se trata o corrige, el paciente entra en coma y fallece.