A través de la estrategia Colombia Siembra se aumentaron en más de un millón las hectáreas cosechadas en los últimos dos años. | Foto: Cortesía Ministerio de Agricultura

OPINIÓN

Siete logros que marcan el avance del campo colombiano

Rafael Zavala, representante de la FAO para Colombia, explica las importantes transformaciones que ha visto y vivido en el sector rural del país.

Rafael Zavala Gómez del Campo*
3 de mayo de 2018

Estoy a cargo de la FAO en Colombia desde septiembre de 2012, y he sido testigo de la transformación que ha tenido el campo del país en estos seis años. Por eso me gustaría resaltar los principales cambios que he visto en el sector y explicar qué hay detrás de los alimentos que llegan sin falta a nuestros hogares.

Además de los acuerdos de paz alcanzados, quiero señalar siete logros contundentes (uno por cada día de la semana, uno por cada día que comemos) para el futuro rural de Colombia, que creo que no son muy tenidos en cuenta por los ciudadanos urbanos.

1. Lo primero que hay que destacar es el trabajo para la transformación del campo: la Misión Rural, la cual representa la hoja de ruta para reducir la pobreza y la desigualdad entre lo urbano y el universo campesino, con el objetivo de promover la estabilidad y la cohesión en los territorios de Colombia. Este instrumento de política pública y su metodología ‘de abajo hacia arriba’ debería replicarse en varios países de América Latina y el mundo.

2. Un proceso exitoso ha sido el de la restitución de tierras (al final de 2018 serán más de 300.000 hectáreas restituidas para más de 38.000 familias) en áreas en las que sus habitantes fueron desplazados. El trabajo de la Unidad de Restitución de Tierras (URT) ha representado justicia efectiva para las víctimas y, junto al gobierno de Suecia, se han generado estrategias de reconciliación, como la asociación entre restituidos y resistentes. Hoy se producen y se procesan alimentos sanos donde antes había zozobra. Este programa tiene un fuerte componente para incluir a las mujeres en el proceso, ubicándolo a la vanguardia a nivel mundial.

3. Respecto a la información, que es uno de los bienes públicos más importantes para la toma de decisiones, hay dos logros contundentes: el censo agropecuario y la implementación de la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra), la cual aporta los datos para saber qué se puede producir mejor y en qué lugar, con qué cantidades y bajo qué condiciones, así el campo crecerá de manera más ordenada.

4. La estrategia Colombia Siembra, del Ministerio de Agricultura, implicó un gran comienzo y reflejó el gran potencial productivo del país al incrementar más de un millón de hectáreas cosechadas en un par de años, este aumento en la disponibilidad de alimentos se reflejó claramente en los mercados.

5. El trabajo de la Agencia Nacional de Tierras (ANT) en la formalización de territorios y el inicio del catastro rural. En un país en el que el 2 por ciento de los productores posee más del 50 ciento de la tierra arable, es necesario un esquema de redistribución que compense esta desproporción mediante un banco de tierras; para ello es necesario el catastro rural y la formalización de la tenencia (solo la mitad está bien formalizada).

6. El enfoque territorial de las nuevas agencias de Desarrollo Rural (ADR), y la Agencia de Renovación del Territorio (ART). La última abarca la producción y consumo en las ciudades, la infraestructura y los mercados. En la ADR los planes departamentales y los proyectos integran lo productivo y lo asociativo, para incluir mejor las agriculturas familiar y campesina, la comercialización, los aspectos ambientales y de infraestructura. Estas son una nueva manera de planear la producción y de tener en cuenta a todos los actores. De la ART se destacan los métodos de los PDET (Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial) que incluyen los municipios más afectados por el conflicto.

7. Por último, una cuestión que no hace parte del sector productivo pero que es fundamental para su viabilidad: hablo de las labores de desminado que se han llevado a cabo en casi 500 municipios, y que han sido apoyadas por Brasil, Canadá, Estados Unidos y Noruega. Esto no es visible para quienes viven en la ciudad, pero en el campo es un alivio para todos. La sensación de seguridad y confianza es parte inicial para cualquier emprendimiento.

*Representante en Colombia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.