Doctor Text se llevó el primer lugar en el Startup Weekend Education Bogotá, realizado en noviembre pasado. Foto: Archivo SEMANA.

EMPRENDIMIENTO

La inspiración de la hoja en blanco

Doctor Text es una plataforma que ayuda a crear y a corregir textos a través de un diagnóstico gratuito y asesoría personalizada. Desde noviembre pasado está al aire una versión preliminar.

31 de marzo de 2015


El bloqueo frente a la hoja en blanco y el reto de plasmar las ideas en un texto fueron los problemas que le dieron vida a Doctor Text. Esta plataforma, que está disponible en su versión beta desde finales del año pasado, nació con la intención de facilitar el proceso de escritura, redacción y corrección. A través de un diagnóstico gratuito y una asesoría personalizada, la herramienta orienta al usuario en la construcción y edición de su texto. Una idea que se llevó el primer puesto del Startup Weekend Education realizado en Bogotá durante noviembre 21, 22 y 23 de 2014.

“La educación básica, porque es un problema que viene desde la infancia, no dota de herramientas al estudiante para que pueda coger las ideas que tiene en la cabeza y plasmarlas en su escritura. Doctor Text hace un barrido del texto en busca de puntos clave para saber de qué carece y qué categorías gramaticales están en uso o en desuso a través de un algortimo”, explicó Andrés Flórez, fundador y CEO del proyecto. Pero, acotó, para generar los códigos que identifican tendencias en la escritura es necesario entender cómo el individuo escribe.

“Cualquier texto tiene un componente que es completamente humano, allí están las motivaciones y la subjetividad. Hay otra parte que está relacionada con una ciencia que ha estudiado la lingüística sobre la estadística del texto. Son básicamente los aspectos técnicos que marcan el discurso y se llaman así: marcadores. Ellos permiten hacer un diagnóstico”, afirmó Flórez. Según él, los marcadores más conocidos son los conectores, esas palabras que hilan el texto. “De lo que más carecen los textos de los estudiantes colombianos, lo digo como docente, y de los profesionales es de argumentación”, agregó.

Por eso la versión de Doctor Text que está disponible tiene dos opciones: la primera es ingresar un texto que está terminado o en proceso y la segunda es para empezar a escribir. El reto que ahora enfrenta Doctor Text es poder identificar qué tipo de escritor es cada usuario y la manera en que usa las fuentes para su texto, con el fin de ayudarle a comenzar y vencer el miedo a la página en blanco. Es por estas particularidades, añadió Flórez, que resulta tan difícil avanzar en perfeccionar el emprendimiento: “Doctor Text requiere desarrollo de software nuevo. No hay en este momento ninguno que haga esto en español”.

De ahí que el encargado de asumir esta función sea su primo Manuel Flórez, un físico que aprendió a desarrollar software y que junto a Julio Rodríguez, estudiante de administración de empresas y cofundador, conforman el resto del equipo de Doctor Text. “Durante el Startup fuimos cinco personas en el grupo, pero tres de ellos empezaron a tomar decisiones, entonces por cuestiones personales y profesionales decidieron retirarse”, afirmó Rodríguez. Fue cuando empezó la búsqueda de un desarrollador para que apoyara la iniciativa.

“Hay muchos ingenieros que no entienden el proyecto, no entienden que haya una necesidad para escribir mejor porque para ellos, en su gran mayoría, no es un tema crítico. Así que decidí llamar a mi primo que está en Estados Unidos haciendo su doctorado en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, con quien ya había trabajado en un emprendimiento anterior”, comentó Andrés. Ellos tres son los humanos detrás de Doctor Text, que espera estar completamente listo para mitad de este año y lograr que máximo a principios del 2016 al menos una universidad lo esté usando.

Eso sí, con el énfasis puesto en que Doctor Text no va a reemplazar la parte humana e inherente a la escritura. “Al final la que está escribiendo es la persona. Esta iniciativa es como la figura de sparring que aconseja al boxeador, le da masajes, lo hidrata, pero quien se la juega es el que tiene los guantes puestos. Doctor Text es una herramienta”, añadió Flórez. Por eso Julio Rodríguez insistió en que se encuentran en un fase de investigación sobre cómo desbloquear el proceso de escritura, a través de una o dos preguntas clave, y que mediante el algoritmo el usuario pueda hilar las ideas, construir un orden y terminar el texto. Después, este se puede ingresar a la plataforma y se generará una evaluación del mismo.

“Esta es una propuesta colaborativa, así que cualquier persona en Colombia y el mundo que quiera ayudarnos es bienvenida. Ahorita necesitamos talento humano para acelerar nuestro proceso”, concluyó Rodríguez.

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