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CIENCIA

Colombia podría tener su propio Silicon Valley

Un proyecto de ley busca que las instituciones de educación superior generen desarrollo para el país y reduzcan el desempleo, por medio de la investigación, ciencia e innovación. Así es cómo se puede lograr.

23 de marzo de 2017

2017 podría marcar un hito para la historia empresarial, científica y universitaria en Colombia. Se espera que este año se apruebe la ley 165 de 2016 para incentivar las ciencias por medio de los spin-off. De hecho, este 30 de marzo el senador Mauricio Aguilar Hurtado, en compañía de los senadores miembros de la Comisión Sexta del Senado, discutirá en audiencia pública en el Congreso de la República la pertinencia de impulsar este modelo de emprendimiento en el país y las instituciones de educación superior.

Pero, ¿qué son los spin-off? En términos técnicos y hasta históricos, se trata de un sistema de gestión que nació en Estados Unidos a finales de los años 70 y que promueve la independencia de un área de negocio hasta que esta se transforma en un negocio. También implica la creación de una empresa a partir de un proyecto que surgió de la extensión de otro.

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Puede sonar confuso, pero lo cierto es que estas iniciativas que aúnan lo investigativo y lo empresarial están por todas partes. Como dato curioso, los pañales que usan los bebés y las calzas que muchos tienen en sus dientes son producto de un spin-off de la Nasa. Y es que el éxito del modelo se basa en la comunicación entre investigadores, empresarios, industria e inversionistas. Para el senador Aguilar Hurtado, el valor añadido de los spin-off que nacen al amparo de las universidades es que “ayudan a transferir el conocimiento y la investigación científica de la academia al mundo empresarial, buscando su aplicación directa en los procesos productivos e incluso su comercialización”.

Otro ejemplo para entender hasta qué punto los spin off pueden ayudar al desarrollo de las naciones se encuentra en  Silicon Valley, Estados Unidos, el mayor centro mundial de industrias tecnológicas y cuna de algunos de los hallazgos más importantes en el campo de la informática. Este centro surgió gracias a la acción de las universidades de Stanford y Berkeley que apoyaron la investigación aplicada y abrieron espacio para motivar a los estudiantes a crear allí sus empresas.

Colombia busca ahora replicar este modelo por medio de la ley 165 de 2016. El objeto de la norma es promover el emprendimiento en las instituciones de educación superior aprovechando los resultados de sus investigaciones y la transferencia de conocimientos a la sociedad como factor de desarrollo humano, científico, cultural y económico.

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De ser aprobada esta ley, las universidades públicas y los profesores del sector oficial podrán crear empresas de tipo spin-off y asociarse con el sector privado sin afectar a sus planes de mejoramiento. En otras palabras, tanto unos como otros podrán beneficiarse económicamente de sus investigaciones, algo que la ley no permite en la actualidad.

Lo cierto es que el modelo de spin-off responde a una tendencia mundial que busca involucrar a las universidades para que las investigaciones que se realizan no se queden solo en el papel, sino que se conviertan en un verdadero aporte para la generación de empleo e ingresos para el país.

En Colombia las iniciativas son mínimas frente a las que se tienen en países de Europa y en Estados Unidos. “El desafío de esta ley es lograr que todas las instituciones de educación del país se interesen en el tema y se creen los mecanismos necesarios para aumentar el número de proyectos y lograr resultados de largo alcance”, explicó a Semana Educación el senador Aguilar Hurtado.

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Las estadísticas internacionales que existen sobre el tema, indican que la media de creación de spin-off en las universidades estadounidenses es de 2,9 empresas por institución y en las europeas, de 1,6. En América Latina no hay cifras al respecto. Solo se conoce el caso de Brasil donde, según Universia, se han generado cerca de 750 spin-off con más de 23.000 universitarios implicados.

Aunque el proyecto de ley sobre los spin-off en Colombia se encuentra a un paso de ser aprobado, todavía quedan algunas barreras por resolver, sobretodo en torno a cómo lograr que se involucren todas las instituciones de educación superior para potenciar el conocimiento y orientarlo a la creación de nuevas empresas. De esta forma, las universidades podrían convertirse en una ventana abierta para la generación de riqueza y la reducción del desempleo en el país.

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