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| Foto: León Darío Peláez

CONFLICTO

La permanente zozobra que se vive en Arauca

La muerte de una niña cerca de una estación de Policía refleja el miedo con el que viven los lugareños.

21 de julio de 2014

Arauca está de luto. Aunque en la región petrolera no son novedad los uniformados y civiles muertos –últimos que cuentan por el 80 %– que dejan los ataques guerrilleros, un resultado particularmente cruel dejó conmocionado ya no al departamento, sino a todo el país.

Esta vez, la capital fue el escenario de un ataque con explosivos dirigido a una estación de Policía que cobró la vida de una pequeña de tres años quien le llevaba, con su madre, el almuerzo a su padre al lugar.

El policía y su esposa se encuentran en un hospital local en condición crítica, en especial la madre, quien será trasladada en las próximas horas a la capital del país, informan fuentes de inteligencia de la Policía.

Los enfrentamientos entre las FARC –frecuentemente mancomunadas con el ELN– y la fuerza pública son el día a día de los habitantes de ese departamento.

“La población y el Ejército viven en medio de la zozobra, tanto en las áreas urbanas como en el campo, sobre todo en el occidente del departamento. En cualquier momento pueden tirar un explosivo”, relata un miembro de la comunidad. A esto se le suma la presencia de minas antipersona en esa parte del departamento.

Aunque en la ciudad el panorama no es tan sombrío, el atentado del fin de semana demuestra que las incursiones de los grupos armados en el casco urbano son más que infrecuentes.

Según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, y fuentes de inteligencia de la Policía, los guerrilleros que viven en el casco urbano se denominan milicianos y se encargan de brindarles información a los demás guerrilleros en las zonas rurales.

Además, la situación en la capital es agravada por su ubicación geográfica. Según fuentes de inteligencia, debido a la ubicación geográfica de la capital de Arauca -a unos tres kilómetros de la frontera con Venezuela- los insurgentes cometen los atentados terroristas, "cruzan el río Arauca y buscan resguardo al otro lado", comentó una fuente local.

Los frentes 18 y 58 de las FARC, junto con el ELN, prácticamente controlan la zona. Así lo evidenció un panfleto difundido el pasado primero de julio en el que la segunda guerrilla más grande del país anunció que impondría a la fuerza la “parálisis total de actividades comerciales, transporte y movilidad” con motivo de su aniversario número 50. Aunque la ciudad no reportó inconvenientes mayores, en los municipios de Saravena, Arauquita y Fortul –en el occidente del departamento– hubo parálisis de actividades.

Por su parte, la Defensoría del Pueblo hizo un llamado para que se excluya la población civil del conflicto armado.

“Una vez más, y como lo ha hecho durante todos estos meses, la Defensoría del Pueblo exigió a los grupos armados ilegales respetar los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario, cesar las maniobras indiscriminadas y excluir la población civil del conflicto, particularmente los niños, niñas y adolescentes”, pide la entidad.

Mientras las autoridades logran dar con los autores de este crimen que cobró la vida de una menor y tiene entre la vida y la muerte a su madre, los conflictos sociales sirven de caldo de cultivo para que las guerrillas se establezcan como una fuerza activa en un departamento rico en producción petrolera, ganadera y agrícola que poco se refleja en sus niveles de desarrollo.