Bolivia ha tenido estrechas relaciones con Irán desde que el expresidente Evo Morales visitó al expresidente iraní Mahmud Ahmadineja, quien lo recibió en el Chapare hace diez años, lo que les permitió suscribir varios tratados de entendimiento mutuos referidos a la producción de alimentos y medicinas.
Además de los institutos de estudio del islam abiertos en Bolivia y las mezquitas que captan a quienes se cambian de religión, Irán ha decidido llevar su alianza con el Gobierno boliviano también al campo militar, lo que fue acordado por ambas naciones.
Recientemente, los ministros de Defensa de ambos países, Edmundo Novillo y Mohamad Reza Ashtiani, firmaron el pasado 20 de julio en Teherán un acuerdo de defensa que, según el Instituto de Estudios para la guerra (ISW) de Washington, incluye la entrega de drones iraníes a Bolivia.
El ministro iraní dijo a BBC Mundo que según “las necesidades críticas de Bolivia en materia de defensa de fronteras y de lucha contra el narcotráfico, estableceremos colaboración en equipos y conocimientos especializados”.
Entretanto, el ISW (Instituto de Estudios para la guerra de Washington) aseguró que Irán le ofrecerá tecnología bélica avanzada a Bolivia, que incluiría aviones no tripulados para vigilancia fronteriza, como lo hacen actualmente 22 países del mundo, entre los cuales se encuentra Venezuela.
El ministro Ashtiani aseguró que los países latinoamericanos tienen “una importancia especial en la política exterior y de defensa de Irán debido a la importancia de la región sudamericana, muy sensible”. A lo que su homólogo Novillo se unió asegurando que Irán es un modelo a seguir para las naciones que buscan su libertad “por su notable progreso en ciencia y tecnología, seguridad e industria de defensa a pesar de las sanciones”.
Preocupación en otros países
El acuerdo militar suscrito hace alusión a la asistencia militar de Irán a la defensa de las fronteras de Bolivia y al combate del narcotráfico, aunque información filtrada menciona la provisión de armas y entrenamiento militar, lo que podría fortalecer la denominada “Escuela Antiimperialista Militar” creada por el exmandatario boliviano Evo Morales, todavía en operaciones, y que cuenta con instructores cubanos, venezolanos e iraníes.
La preocupación de países vecinos de Latinoamérica gira en torno a las tensiones fronterizas que ha tenido Bolivia en los últimos meses con países como Perú, por la idea de Morales de alentar el separatismo de los productores de coca de Puno, y con Argentina, por el activismo que practica el cocalero en Jujuy, como lo ha denunciado el gobernador de esa provincia.
Sin embargo, el acuerdo firmado por los dos gobiernos no alude a ningún conflicto fronterizo específico y repite la firme determinación de Irán de apoyar a Bolivia porque es un país situado en una geografía “muy sensible”.
Y es que el actual presidente de Bolivia, Luis Arce, ha mantenido y reforzado la actitud de amistad y de alianza política con Irán. En octubre del año pasado, cuando estuvo en la asamblea de las Naciones Unidas, solo se entrevistó con el presidente iraní.
José Carlos Sánchez, opositor del gobierno de Luis Arce, aseguró que el acuerdo suscrito en Teherán tiene preocupada a la región, porque el régimen iraní promueve el terrorismo internacional y es responsable de un atentado, ocurrido en 1994, en Buenos Aires. Sánchez dijo que, en aquel atentado contra la Amia (Asociación Mutual Israelita Argentina), sede de la mutual judía, murieron 85 personas, entre las que se encontraban ocho ciudadanos bolivianos.
Añadió que algunos países vecinos de Bolivia tienen gobiernos de izquierda, y destacó que ninguno de ellos apoya el terrorismo internacional, como ahora lo está haciendo el MAS (Movimiento al Socialismo) con su acuerdo con el régimen iraní. Sánchez enfatizó en que Bolivia no puede olvidar que es un país occidental, democrático y cristiano.
Por su parte, el exsenador Federico Pinedo se manifestó por medio de su cuenta de Twitter: “Deploramos que un país hermano como Bolivia haya realizado un acuerdo de seguridad o defensa con Irán, país en conflicto con la Argentina por terrorismo. La región es zona de paz. Merecería un pedido de explicación de nuestro país”.
De la misma manera, la Daia (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas) emitió un comunicado con la firma de su presidente, Jorge Knoblovits, y de su secretario general, Alejandro Zuchowicki, en el que “alerta sobre los riesgos para la seguridad de la Argentina y de la región tras haberse conocido el convenio de defensa firmado por Bolivia con Irán, país vinculado a la agrupación terrorista Hezbollá y responsable del atentado perpetrado contra la sede de la Amia-Daia que causó 85 muertos y más de 300 heridos.”
La entidad que representa a la comunidad judía argentina invitó al Gobierno argentino “a condenar este acuerdo y exigir al de Bolivia que reconsidere su decisión tras haberse producido dos feroces ataques terroristas en el país, en 1992 y 1994″.
“Un insulto y una agresión directa a la República Argentina”, fue el contundente señalamiento del embajador y exdiputado argentino Diego Guelar, quien añadió que, “…Debemos protestar enérgicamente ante semejante despropósito…”.
El exdiputado y funcionario uruguayo Miguel Ángel Toma se sumó a esta ola de rechazo asegurando que “Irán provee los drones con que Rusia ataca a Ucrania. Ello obliga a un claro realineamiento geopolítico y en consecuencia una reformulación de nuestra inteligencia, al mismo tiempo que una reorganización integral de nuestras FF. AA. Más que nunca, este hecho pone de manifiesto la importancia trascendental de ambas instituciones”.
Del texto firmado, por el momento, se conoce lo que Teherán ha comunicado a la prensa a través de su agencia Irna (Agencia de Noticias de la República Islámica de Irán), pero el contenido completo del memorándum aún no ha sido publicado.
Por ahora, lo que oficialmente se conoce es que Irán colaborará con Bolivia en su lucha contra el narcotráfico y en el refuerzo de la vigilancia de sus fronteras. El ministro de Exteriores iraní aseguró que el acuerdo también incluiría la venta de material y entrenamiento de personal.