“Sobre esto hay algo que ha sido claro en el planteamiento del Gobierno y es la afectación a los menores que se encuentran en campamentos de las organizaciones ilegales; allí no se puede bombardear si hay presencia de menores, si la inteligencia acredita que no existen menores, esa restricción no existe”, dijo el ministro Velásquez.

La decisión anunciada por el ministro de Defensa, aunque aclara condiciones específicas para realizar estos operativos con bombas, finalmente se convierte en un reversazo a una de las primeras decisiones que tomó el gobierno del presidente Gustavo Petro en agosto de 2022 y teniendo como antesala ácidas críticas a otro bombardeo del Ejército, en Caquetá, en el que murieron siete menores de edad entre los 12 y los 17 años, revelado en 2019.

Dijo el ministro: “Significa que si la inteligencia acredita fehacientemente que no existen menores, esa restricción tampoco existe, es decir, no es la prohibición de bombardeo por el bombardeo (...); insisto, no es la prohibición del bombardeo en absoluto, eso es una operación que es admitida aquí, lo que hemos tenido por restricción, y de esa manera se transmitió que desde el principio de este gobierno es cuando hay presencia de menores en esos espacios susceptibles de ser bombardeados”.

El general Helder Giraldo, comandante de las Fuerzas Militares, indicó que la Fuerza Aérea está en condiciones de ejecutar bombardeos contra las organizaciones de alto impacto. | Foto: GUILLERMO TORRES

Una de las estructuras criminales que sería objeto de bombardeo por parte de las Fuerzas Militares sería el Clan del Golfo, que el pasado fin de semana asesinó a cinco militares en el departamento de Antioquia. Hay que mencionar que tras la compleja situación de orden público en Segovia, Antioquia, donde se dio el ataque contra los uniformados, las Fuerzas Militares enviaron 200 hombres para reforzar la seguridad.

“Con más de 200 soldados, adicionales a los que ya se encontraban en el área, así como capacidades tecnológicas, se continúa, por tierra y aire, en el nordeste antioqueño y sur de Bolívar en contra de la subestructura Jorge Arboleda del grupo armado organizado Clan del Golfo, quienes son los culpables del asesinato de cinco soldados profesionales, así como de acciones criminales contra la población civil como extorsión, homicidios selectivos, narcotráfico, desplazamiento, reclutamiento forzado entre otros”, indicaron las Fuerzas Militares.

“Sin escatimar esfuerzos, se ha logrado la movilidad de las tropas con el apoyo de helicópteros Black Hawk UH-60 y misiones de apoyo aéreo cercano para la seguridad en tierra, por parte de aeronaves AHS Arpía, Bell212 , AC47 Fantasma y las aeronaves no tripuladas apoyarán con labores de vigilancia e inteligencia estratégica en puntos claves de la región. Estas cuentan con equipos y radares que servirán para orientar a las tropas y ubicar a los criminales del Clan del Golfo”, agregó la autoridad militar.

Suspensión de bombardeos

Justamente, sólo dos semanas después del inicio del nuevo gobierno, fue el ministro Velásquez quien anunció el fin de los bombardeos.

En ese momento, la decisión que fue señalada en principio como el freno a bombardeos por la presencia de menores en las filas de las organizaciones ilegales y la posibilidad de afectar a la población civil, fue aclarada por el ministro, quien dijo: “Estas acciones en esta dirección tienen que concluir. Los bombardeos deben ser suspendidos”.

El ministro de Defensa aclaró que los bombardeos no se pueden ejecutar contra las organizaciones criminales que están en cese al fuego con el Gobierno, que para este momento son las disidencias de las Farc de Iván Mordisco y la guerrilla del ELN.