Los colombianos siguen ‘engordando’ la ‘vaca’ que promueve la Gobernación de Antioquia para terminar de construir las carreteras de cuarta generación, ante la supuesta indisposición del Gobierno para asumir los costos. En doce días de recaudo, y en medio de polémicas, 12.480 personas se han sumado a la iniciativa.
El fondo tiene el objetivo de unir un billón de pesos para continuar con las grandes obras de infraestructura.
En particular, la inyección económica se requiere con urgencia para culminar el túnel del Toyo, la vía que une al Urabá con la ciudad de Medellín: allí se necesitan, por lo menos, 650 mil millones de pesos.
La colecta empezó el pasado 22 de marzo y, hasta este 2 de abril, se han hecho transacciones bancarias al interior del país y en el exterior por cuatro mil millones de pesos. Según los registros de la administración regional, el 72 % de los movimientos se han hecho en Antioquia y el 28 % por fuera del departamento.
Si bien estos números son optimistas, están lejos de la meta. Por eso, el gobernador Andrés Julián Rendón le pidió a su equipo de trabajo nuevas estrategias para incentivar las donaciones. En esa lucha lo acompaña la Cámara de Comercio de Medellín, ProAntioquia y Fenalco, las agremiaciones más importantes de la zona.
Así lo informó el mandatario por medio de sus redes sociales: “Hoy tuvimos sesión con los integrantes de la junta de la ‘vaca’. Fijamos próximas tareas. Una de ellas es esencial: impulsar y estimular los aportes de la empresa privada y explorar otros mecanismos para lograr nuevos aportes. La ‘vaca’ es una causa común”.
Los nietos del expresidente Álvaro Uribe, quien ideó la iniciativa, están dispuestos a sortear uno de sus caballos para sumar más dinero al proyecto que busca evitar que las calles terminen en ‘elefantes blancos’: “Nuestros nietos autorizan rifarlo, a través de una entidad seria, para contribuir a la ‘vaca’ cívica. Infundir amor a la patria”.
La polémica de la ‘vaca’
La vaca para la construcción de las vías 4G de Antioquia tiene un nuevo frente de debate. Ante el Consejo de Estado fue presentada una demanda de pérdida de investidura contra los congresistas que han hecho públicos sus aportes a la colecta de fondos encabezada por la Gobernación de Antioquia.
El proceso fue presentado este Lunes de Pascua contra los senadores Paloma Valencia, Esteban Quintero, Andrés Guerra y María Fernanda Cabal, además de los representantes a la Cámara Juan Espinal, Hernán Cadavid, John Jairo Berrío y Julián Peinado.
La mayoría de los congresistas demandados pertenecen a la bancada antioqueña o al Centro Democrático, salvo el representante Peinado, que es del Partido Liberal, pero ha sido uno de los críticos de las posturas del Gobierno Petro sobre el departamento.
El abogado demandante, Carlos Mario Patiño, sostuvo que, “según el decreto de la Gobernación para reglamentar la vaca, esta se hace mediante donaciones y las donaciones son, típicamente, un contrato cuya parte pasiva es la Gobernación, que es una entidad pública. Ellos están haciendo a título personal una donación a una entidad pública, lo que sería un contrato estatal”.
La demanda fue presentada ante la Sala Especial de Decisión de Pérdida de Investidura del Consejo de Estado, bajo el argumento de que los legisladores demandados habrían violado el régimen de inhabilidades e incompatibilidades que les establece la Constitución Política.
Específicamente, el litigio hace referencia al artículo 180 en su numeral 2 de la carta magna, que habla de las actividades de “gestionar, en nombre propio o ajeno, asuntos ante las entidades públicas o ante las personas que administren tributos, ser apoderados ante las mismas, celebrar con ellas, por sí o por interpuesta persona, contrato alguno, con las excepciones que establezca la ley”.